El tsunami que ha generado la sentencia no sólo ha sacudido la calle. También ha desestabilizado la relación, ya de por si difícil, entre los socios de Govern. Factores que han despertado malestar entre JxCat y ERC hay muchos. Desde el anuncio inesperado y unilateral del president de la Generalitat comprometiéndose a validar la independencia esta legislatura, a la reunión que el presidente del Parlament convocó este sábado con Ada Colau, patronales y sindicatos para "desescalar" el conflicto, sin invitar a Torra. Este martes, JxCat se ha reunido con Torrent para pedirle explicaciones sobre ese encuentro.

La cita se ha alargado una hora y media y a la salida ninguna de las dos partes ha querido hacer comentarios. El contacto se ha producido precisamente el mismo día que los partidos independentistas han vuelto a ensayar una reconstrucción de la frágil unidad que les religa con una propuesta de resolución de respuesta a la sentencia.

El pasado sábado, horas después de la jornada de disturbios más conflictiva -con ocho horas de enfrentamientos entre un grupo de manifestantes y la policía-, Torrent optó por convocar una cumbre para "abordar la situación, desescalar la violencia y encontrar una solución democrática al conflicto" a la que invitó a Ada Colau, CCOO y UGT, Pimec y Fomento, el Círculo de Economía y otras organizaciones como LaFede.cat, la Mesa del Tercer Sector y la FAVB.

La reunión coincidió en tiempo y hora con otro encuentro que el president Torra y el vicepresident Aragonès habían organizado en el Palau de la Generalitat también para discutir sobre el actual contexto tras la sentencia y donde estaban citados los alcaldes de Barcelona, Tarragona, Lleida y Girona. Colau les plantó para asistir al concilio de Torrent.