Joaquim Forn ha empezado su declaración respondiendo al fiscal Fiel Cadena, porque él sí, a diferencia de Oriol Junqueras, ha querido responder a dos de las acusaciones: fiscalía y Abogacía del Estado. Ha rechazado Vox.

Forn hace equilibrios durante el interrogatorio para no perjudicar la parte de la causa que hay en la Audiencia Nacional donde se juzgará al major Josep Lluís Trapero: "Mi compromiso político siempre ha sido de apoyo al referéndum y hacerlo posible, pero lo diferenciaba de mis competencias como conseller".

El exconseller de Interior ha dicho que como conseller de Interior "dio cumplimiento a todas las instrucciones de fiscalía y de la magistrada Armas", que pedía actuar para impedir el referéndum del 1-O de una manera proporcionada.

Joaquim Forn se ha reafirmado en el derecho a votar en referéndum, aunque ha querido desmarcar a los Mossos: "Compartía el compromiso de sacar adelante el referéndum, pero entendía que los Mossos tenían que cumplir las órdenes y el president Puigdemont dijo que lo entendía y que no me preocupara".

Quien fuera conseller de Interior ha insistido en el hecho de que "el Govern tenía un compromiso de celebrar el referéndum".

Con la espada de Damocles encima del cuerpo de los Mossos d'Esquadra y la cúpula política, Forn ha tenido que nadar y guardar la ropa para que su interrogatorio no perjudique a nadie: "Ninguno de los Mossos d'Esquadra fue contrario a la Constitución", ha dicho. Añadiendo que "nunca recibieron órdenes políticas. Eso lo han declarado".

"Cuando el 19 de julio dije que los Mossos permitirían el voto durante el referéndum, no había ningún requerimiento judicial", ha explicado Forn, nuevamente para exculpar a los Mossos d'Esquadra.

El 1-O

Sobre el dispositivo de los Mossos el 1 de octubre, Forn ha corregido la pregunta al fiscal sobre si los agentes fueron a pie. El conseller ha explicado que se tuvieron que alquilar coches y que el dispositivo no le pareció bien ni mal. Y ha vuelto a explicar, como ha hecho en varias declaraciones durante la instrucción, que él no decide los operativos policiales.

Forn ha relatado que se destinaron 8.000 agentes, haciendo el dispositivo más grande hecho hasta ahora, superior al de los atentados del 17-A.

El fiscal ha querido criminalizar las fiestas que tuvieron lugar durante las 48 horas antes del referéndum en las escuelas. Y Forn lo ha tenido que frenar: "La comunidad educativa organizó jornadas de puertas abiertas. Esto no es un hecho ilegal, que yo sepa".

La violencia

"El 1-O hubo violencia por actuaciones erróneas de cuerpos de seguridad del Estado", ha explicado Forn, negando la violencia necesaria para el delito de rebelión de la ciudadanía y el Govern. "Si usted quiere deducir que había una certeza de que habría una violencia generalizada el día del referéndum, no estoy de acuerdo", ha insistido. 

El 20-S

Forn ha intentado explicar en medio de las preguntas, algunas absurdas de la fiscalía, cómo fueron los hechos el 20 de septiembre durante la manifestación ante la Conselleria d'Economia, donde la Guardia Civil estaba realizando un registro. "Manifestarse en contra de las decisiones judiciales, que yo sepa, no es inconstitucional", ha querido aclarar en medio del relato de cómo salió la secretaria judicial, según la fiscalía, "subiendo por los tejados". Forn ha calificado de "peliculera" esta descripción.

El conseller de Interior ha explicado que la secretaria judicial salió a las 23 horas por una puerta que daba el cine Coliseum porque ella no quiso salir antes por la puerta principal.

Forn ha reprochado a la Guardia Civil no avisar sobre los registros a los Mossos d'Esquadra que son los que tienen las competencias en orden público: "Nos hubiésemos ahorrado algún problema".

¿Devastados?

Joaquim Forn ha afirmado que hubo dos coches "devastados" de la Guardia Civil, pero no siete como ha intentado apuntar la fiscalía durante el interrogatorio. El conseller Forn ha utilizado la palabra "devastados" ante la sorpresa de todo el mundo, también del fiscal, que después ha intentado preguntar si la multitud intentó entrar por la fuerza, hecho que Forn ha negado rotundamente.

El currículum indepe de Forn

La fiscalía ha arrancado con el caso de Forn, por el que fue absuelto el año 1986, por entrar una bandera al Estadi Olímpic, hasta el punto de preguntarle si sabía que le habían pinchado el teléfono. A lo que el exconseller de Interior ha respondido desenfadado de que la policía no avisa en estos casos.

El ministerio público ha querido poner en evidencia su ideología independentista, que, por otra parte, nunca ha escondido Forn, al inicio del interrogatorio.

Quim Forn no se ha escondido de su ideología a preguntas del fiscal Fiel Cadena: "He participado en muchas manifestaciones para defender la independencia".