El candidato del PSC a las elecciones al Parlament del 12 de mayo, Salvador Illa, ha pasado al ataque. En un coloquio en el Círculo Ecuestre este lunes por la tarde, Illa ha replicado a la advertencia que el president en el exilio, Carles Puigdemont, ha hecho a través de una extensa entrevista en ElNacional.cat donde defiende que, si el socialista sigue los pasos de Jaume Collboni para ser investido a pesar de no ganar las elecciones, la legislatura española peligra. El primer secretario del PSC ha tildado de "falta de respeto hacia la ciudadanía" esta premisa de Puigdemont recordando que él ganó los comicios del 14 de febrero de 2021 y, finalmente, Aragonès fue investido con los votos de Junts y la CUP: "A mí también me hicieron eso que llaman 'hacer un Collboni', es legítimo y forma parte de las reglas del juego, y no me quejé". En este caso, la expresión 'hacer un Collboni', para Puigdemont, alude al hecho de materializar una suma entre partidos bastante antagónicos para impedir la alcaldía de Xavier Trias: el socialista logró el apoyo de los comunes y del PP.
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Para Illa, estos términos de la precampaña y campaña son una "falta de respeto" hacia la ciudadanía porque tendrían que estar explicando "los planteamientos políticos" de cada uno de manera "educada y respetuosa". Además de recordar que no fue elegido president a pesar de ganar las elecciones, Salvador Illa ha destacado que tanto Junts como Esquerra Republicana firmaron un cordón sanitario al PSC días antes del 14-F: "Afortunadamente, más tarde han firmado acuerdos con nosotros". "He respetado las reglas y me parece que el resto tiene que hacer lo mismo", ha añadido, insistiendo en que buscará "acuerdos amplios" y que a los únicos que los excluye de la ecuación son Vox y Aliança Catalana. En este sentido, Illa se ha erigido en un político que se aleja de la "confrontación": "No me gusta eso de vetar o bloquear. La ciudadanía nos dará la representatividad que corresponda y, a partir de aquí, tendremos que tener la capacidad de ver cómo alcanzamos un esquema de Govern estable y llegar a acuerdos amplios".
Illa y las acusaciones de ser el delegado de La Moncloa: "Prefiero colaborar y resolver problemas a incomodar y no hacer nada"
Por otra parte, una de las cuestiones que se le ha planteado al candidato socialista a lo largo de su coloquio —introducido por el presidente del Círculo Ecuestre, Enric Lacalle, y moderado por el delegado de EFE en Catalunya, Carles Escolà— son las acusaciones de los juntaires y republicanos sobre el hecho de que Illa actúa como "delegado de La Moncloa". El socialista se ha revuelto contra estas críticas y ha sostenido que él no mide su "éxito en función de si incomoda mucho o poco": "Ellos, durante 10 años, han incomodado al Gobierno, pero no han hecho nada. Han arrastrado a Catalunya a la cola. Yo prefiero colaborar y resolver problemas a incomodar y no solucionar nada".
Paralelamente, esta mañana Illa ha señalado en una entrevista que un nuevo Govern de Junts y ERC sería la "destrucción mutua asegurada para Catalunya". En la línea de este planteamiento, ha añadido que las "disputas y peleas" que los dos partidos tienen "acaban siendo una destrucción para Catalunya": "Han estado gobernando con todas las fórmulas posibles, se han presentado juntos a unas elecciones y no ha funcionado nada".
Además, el medio centenar de socios de la órbita empresarial del Círculo Ecuestre se ha mostrado preocupado por la presión fiscal en Catalunya y algunos de ellos han preguntado por si el socialista planteará rebajas impositivas. Salvador Illa ha situado el marco europeo como su espacio de referencia y ha destacado que la Comisión Europea todavía sitúa al Estado tres puntos por debajo de la media europea en carga tributaria. Con todo, el candidato del PSC ha sostenido que "puede haber mecanismos para ajustar la fiscalidad" y se ha mostrado abierto a hacer "ajustes técnicos en algunas figuras impositivas", teniendo presente siempre "el horizonte que fija la Unión Europea".
La creación del consorcio tributario
Esta cuestión le ha servido al socialista para defender, de nuevo, al consorcio tributario en materia de financiación. Para Illa, la vía de la financiación singular es una "frustración" y aboga por el "despliegue del Estatut" y el respeto al principio de ordinalidad. En opinión del socialista, en la última década "no se ha hecho nada" en este ámbito y ha criticado que se quiera utilizar esta cuestión como "excusa permanente de los problemas que tiene" el país. En este sentido, su receta es "gestionar mejor los recursos disponibles", crear el consorcio tributario que recoge el Estatut, eliminar la competencia fiscal desleal entre comunidades autónomas y revertir el hecho de que Catalunya sea el tercer territorio en aportación de recursos al Estado y el decimocuarto a la hora de recibirlos: "Hace falta una mejor financiación para generar prosperidad y reducir la desigualdad".
Todavía en referencia al ámbito económico y empresarial, Salvador Illa ha apostado por "dar estabilidad y certeza" como fórmula para que las sedes sociales de las empresas que se marcharon puedan volver: "Es lo mejor que se puede hacer a fin de que cada empresa u organización tome con libertad su decisión". Todo lo ha enmarcado en su principal línea de actuación del programa político, que será impulsar la "tercera gran transformación social en Catalunya", situando los servicios públicos como principal prioridad.