El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha asegurado este sábado desde La Moncloa que el "golpe" de la Guardia Civil en el Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI) de la Generalitat pone de manifiesto que "el referéndum ya ha sido anulado por el Estado de derecho". Según Méndez de Vigo, la operación busca evitar el "voto telemático y el recuento de los votos", y se ha hecho "en el marco estricto de la ley" y "por orden judicial".

El referéndum, ha dicho, "está fuera de la legalidad, no tiene ningún apoyo internacional, no tiene sindicatura electoral, no hay papeletas, censo, ni mesas, y hoy también sabemos que tampoco hay recuento telemático de los posible resultados". Además, ha criticado que "a diferencia de las 35 consultas que se han hecho en Catalunya desde 1977", esta "es la primera en que tampoco se respeta la jornada de reflexión, porque varios de sus promotores están haciendo campaña". Por este motivo ha querido lanzar un mensaje de "serenidad y tranquilidad" a la población española y ha asegurado que su gobierno "sigue al detalle lo que está pasando a Catalunya".

Méndez de Vigo no ha querido avanzar si el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, comparecerá este domingo para valorar los acontecimientos en Catalunya. Fuentes de su equipo han explicado, sin embargo, que el presidente español estará en su despacho. También estará en La Moncloa la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, así como el mismo portavoz.

Posibles comparecencias

Según Méndez de Vigo, las posibles comparecencias se decidirán a lo largo de la mañana del 1-O. "Lo veremos a lo largo de la mañana y tomaremos decisiones oportunas, pero en todo caso mantendremos informados en todo momento a los españoles de estos acontecimientos", ha dicho.

Con respecto a las concentraciones en defensa de la "unidad de España" que han tenido lugar este sábado en Madrid y otras ciudades del Estado, Méndez de Vigo ha asegurado que su gobierno "respeta siempre la libertad de expresión, reunión y manifestación de todos". "España es una democracia madura y avanzada y la gente expresa, como es lógico, sus preocupaciones, deseos y anhelos".