Hay cierta omertá en el Madrid político y mediático en relación al informe de la CIA que sitúa a Felipe González en la X del terrorismo de estado de los GAL. No ha sido hasta este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que un miembro del Gobierno ha sido preguntado sobre la cuestión. Lejos de dar una valoración sobre las nuevas revelaciones desclasificadas, la portavoz María Jesús Montero ha escurrido el bulto y ha evitado valorar las informaciones.
A raíz de las comparecencias de González y Marlaska solicitadas por EH Bildu, Montero ha sido preguntada sobre la opinión del Gobierno sobre estas informaciones. La portavoz del Gobierno se ha aferrado a eso para decir que no podía responder a la cuestión. "No he tenido ocasión de escuchar a los representantes de Bildu hablar de esta cuestión", ha replicado la dirigente socialista. "Cualquier formación política tiene la capacidad de solicitar la comparecencia de cualquier ministro de este ejecutivo, que estará dispuesto a asistir cuando las Cortes lo citen", se ha limitado a añadir. Ha insistido en poner el foco sobre los abertzales: "No quiero aventurarme a hablar sin escuchar lo que han dicho".
Montero también ha defendido que la Mesa del Congreso, con los votos del PSOE, haya vuelto a tumbar la petición para investigar Joan Carles I. "Si los letrados del Congreso consideran que la materia que se quiere investigar no puede ser por cuestiones legales, el gobierno lo respeta y no entra", ha sostenido.
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