Quejarse del desastre de Rodalies, no; pero asumir responsabilidades por el desbarajuste en las oposiciones, sí. Eso es lo que tiene que hacer, según el Gobierno, la Generalitat. Lo ha dejado bien claro este lunes la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, que en una comparecencia desde La Moncloa ha cargado contra el president Pere Aragonès por "pretender utilizar" en campaña el nuevo desastre de Rodalies, consecuencia de una nueva avería en la R2 Sud. "También pretende no hablar de lo que le corresponde, como por ejemplo el caos con las oposiciones", ha señalado la exalcaldesa de Gavà, municipio donde precisamente ha tenido lugar este nuevo incidente que ha empeorado todavía más el funcionamiento de trenes en Catalunya.

"Más allá de la campaña, el Ministerio trabaja por solucionar la avería, haya o no campañas electorales en marcha", ha insistido Sánchez desde la sala de prensa del Palacio de La Moncloa. De todos modos, a pesar de haber criticado duramente la reacción de Pere Aragonès a la nueva avería de Rodalies, la ministra no ha querido avanzar qué le responderá a la carta que le ha enviado al president de la Generalitat sobre esta cuestión. El jefe del ejecutivo catalán le envió este pasado sábado una misiva en la que le reclamaba de una vez por todas el traspaso integral del servicio de trenes; además de tildar de "inaceptable" la respuesta del gobierno de Pedro Sánchez a este nuevo incidente.

 

Según la ministra, la respuesta de su ejecutivo está bien lejos de ser "inaceptable". "Este gobierno y yo, personalmente, estamos centrados desde el primer día en solucionar el problema y reparar la avería lo antes posible", ha señalado; además de asegurar que desde el principio se han intentado dar todas las explicaciones pertinentes, por mucho que, una semana después, todavía nos encontramos "en el terreno de las hipótesis" sobre la causa de la avería.

"A partir de aquí, yo no puedo hacer nada más que no sea discrepar con el president de la Generalitat, porque este gobierno invierte como nunca en Rodalies", ha dicho, además de querer también disparar contra el PP: "Partimos de una década de desinversión" en la red de trenes catalana. "Son datos objetivos que se pueden contrastar, y estamos invirtiendo como nunca en la red de Rodalies", ha insistido.

En la carta enviada al Gobierno, Aragonès se quejaba de que la reacción del Estado a esta avería y la situación global del servicio "es del todo inaceptable". Remarcó que hace años que desde Catalunya se denuncia "el abandono y la falta de inversiones" de la red de Rodalies de Catalunya. Ahora, con esta avería, ha advertido que "nadie se puede inhibir, y menos los responsables políticos directos". En este punto, señalaba en su texto que se trata de un problema de naturaleza política, "que va más allá de las explicaciones técnicas que puedan dar Adif y Renfe, y que exige explicaciones y compromisos políticos para revertir el funcionamiento de un servicio deficiente que la ciudadanía de Catalunya no se merece".