El proyecto de presupuestos del Estado vuelve a poner en evidencia las grandes diferencias que hay entre los partidos independentistas. Ayer fue Junts per Catalunya quien insistió a sus socios de Govern que se sienten juntos con el Gobierno a la hora de negociar las nuevas cuentas públicas. Hoy ha llegado la respuesta de ERC, en boca de su portavoz Gabriel Rufián, que ha criticado la actitud de los junteros. "Es curioso que Junts sí que quiera sentarse con el PSOE a negociar unos presupuestos y en cambio no quiera sentarse a negociar un conflicto político".

Hasta aquí han llegado las referencias a Junts per Catalunya, a pesar de ser preguntado por la propuesta de negociar conjuntamente los presupuestos. Gabriel Rufián ha justificado que, cuanto más se pelean las formaciones independentistas, "más futuro le regalamos al PSC".

Dicho todo eso, el portavoz de ERC en el Congreso ha reiterado que, a día de hoy, siguen en el no a los presupuestos del Estado para 2022. Ha recordado al Gobierno que su aprobación pasa por sus votos, pero no ha querido entrar en las futuras negociaciones, y todavía menos hablar de "condiciones", "líneas rojas" o "marcos temporales".  Tampoco ha querido vincularlo ni con el traspaso de Rodalies ni con la ley audiovisual. Simplemente ha recordado que "todo el mundo sabe lo que reivindica ERC". Y ha insistido en que utilizarán su "fuerza negociadora" en beneficio de los ciudadanos de Catalunya. "Si empezamos a decir todo lo que queremos, haremos un mal favor a la negociación", ha concluido Rufián.

Ley de memoria democrática

Hoy el Congreso debate la tramitación de la nueva ley de memoria democrática, contra la cual los republicanos han presentado una enmienda a la totalidad con texto alternativo. Rufián ha remarcado "con pesar" que no ha habido ningún avance. "Una buena ley de memoria histórica debería tener el OK de los tres partidos históricos: del PSOE, del PNV y de ERC," ha defendido el portavoz republicano. Ha puesto el foco en cuestiones como la declaración de ilegalidad de la dictadura franquista o el papel de la Iglesia católica. "Cosas que son de primero de antifascismo", ha remachado. Ahora mismo están "muy lejos" y esperan poder llegar a un acuerdo en comisión.

Preguntado sobre la fotografía con PP y Vox en contra del proyecto de ley de memoria, Rufián lo ha comparado con la pinza del PSOE, el PP y Vox contra las comisiones de investigaciones de la monarquía española. Y ha acabado con un dardo: "Ahora que el PP busca una sede, el Valle de los Caídos les iría bien".