Esquerra Republicana reúne este viernes a su ejecutiva nacional en Ginebra. Se trata de una reunión ordinaria del partido, pero se ha decidido hacerla en Suiza esta vez para visibilizar la represión y la anomalía que supone para el partido tener que desplazarse hasta otro país para reunirse con su secretaria general. Marta Rovira está exiliada allí desde finales de marzo del año pasado y, aunque participa en las reuniones a través de videoconferencias, no ha podido participar físicamente desde entonces.

En el encuentro, en el que participarán una cuarentena de cargos del partido republicano, está previsto que se hable de la represión y también de cómo se debe encarar el juicio del 1-O, que está previsto que arranque dentro de unas semanas, según indican fuentes del partido. La reunión coincide con el mismo día que el president Quim Torra viaja a Waterloo para reunirse con su antecesor y líder de JxCat, Carles Puigdemont, con quien está previsto que también planifiquen cómo encarar el juicio del 1-O.

Las diferentes reuniones tienen lugar cuatro días antes de que se acabe el plazo de presentación de los escritos de defensa, que finaliza el 15 de enero, hecho que hará que se arranque toda la maquinaria de cara al inicio del juicio. De hecho, el Tribunal Supremo ya ha pedido que los presos se trasladen a Madrid a finales de mes, por lo que el juicio podría empezar poco después.

Sin novedades en el flanco de los presupuestos

En la reunión de los republicanos también está previsto que se trate la actualidad, como se hace habitualmente en estas reuniones, y eso podría incluir hablar de los presupuestos generales del Estado. Sin embargo, las mismas fuentes descartan que de la reunión pueda salir alguna novedad en este sentido. De momento los republicanos defienden que sólo votarán las cuentas de Pedro Sánchez en caso de que este haga un gesto.

Aunque el president Quim Torra anunció esta semana que ni el PDeCAT ni ERC votarían a favor de los presupuestos, ni siquiera de su tramitación parlamentaria, el debate en el seno de los dos partidos sigue abierto. Desde de ERC defienden que sin un gesto no habrá cuentas, igual que Torra, pero le recuerdan que la decisión la tomarán los republicanos.

Así lo aseguró este jueves el portavoz de los republicanos en el Congreso, Joan Tardà, que defendió que el Govern no es monocolor y que "la decisión la tomará ERC", después de que Torra alertara de que un voto positivo en las cuentas desencadenaría una "crisis de gobierno". Unas declaraciones que no han gustado a sus socios.

El retorno de Rovira

Así, aunque de la reunión no tiene que salir ningún gran acuerdo, tiene una especial relevancia por el hecho de que es la primera vez que ERC celebra una reunión fuera del territorio catalán y que su secretaria general puede asistir personalmente desde que está en el exilio. A pesar de que, evidentemente, varias delegaciones del partido ya habían viajado hasta Ginebra para reunirse con ella y que Rovira había participado hasta ahora en los encuentros por videoconferencia o por conexión telefónica.

Rovira asumió un papel público secundario cuando empezó el exilio, a pesar de estar activa en el ámbito interno, pero desde hace unas semanas ha vuelto a coger más protagonismo mediático con nuevas apariciones en actos o tuits en las redes sociales. De hecho, este viernes será Rovira quien atenderá a los medios de comunicación al finalizar la reunión para explicar las decisiones que se hayan tomado y valorar la actualidad política.