El president en el exilio, Carles Puigdemont, ha cortado de raíz las especulaciones sobre algún tipo de relación con la presunta trama que lo vincularía con supuestos terroristas integrados en los Comités de Defensa de la República: "Es un delirio, una fantasía pura y dura".

En una entrevista a El Matí de Catalunya Radio, Puigdemont ha asegurado que en estos momentos "hay una narrativa para colgarme a mí el sambenito del terrorismo" y ha afirmado que para el independentismo "no hay ningún atajo que no sea la no violencia". "Se inventan cosas para comprometer a una persona", ha agregado. El president, que ha insistido en que "el independentismo ha demostrado que es un movimiento pacífico", ha insistido en que "siempre hemos hecho un llamamiento público al comportamiento pacífico".

Respecto a la renuncia de Andrés Martínez, exdirector de los Mossos, Puigdemont ha asegurado que se "enterarse por la prensa", pero ha preferido no hacer ninguna valoración, ya que se trata de una "cuestión interna del Govern de Catalunya".

Dos vertientes de la respuesta a la sentencia

Puigdemont, que ha recordado que no necesita "ningún intermediario para hablar con el president Torra" ante las acusaciones de haber utilizado a su hermana para ello, ha anunciado que la respuesta a la sentencia del juicio contra el proceso independentista deberá tener dos vertientes, "la institucional y la civil", señalando que "si hay sentencia condenatoria, la respuesta institucional debe ser absolutamente unitaria", ya que "no será una condena a los presos, sino a dos millones de personas".

Nadie se puede quedar en casa", ha afirmado el president en el exilio, que ha pedido a la ciudadanía que "salgan de casa con una papeleta y que ratifiquen el mandato del 1-O" en las elecciones españolas del 10 de noviembre.

Llamada a superar el 50% de votos el 10-N

Asimismo, Puigdemont ha dado mucha importancia a la participación independentista en las elecciones del 10-N, señalando que si se "supera el 50% del voto independentista, la mirada de Europa sobre el conflicto cambiaría", porque a pesar de reconocer que " para el Estado español no importa" el grueso del voto independentista, "ni que fuéramos el cien por cien", sería muy diferente para los "aliados de España", en el sentido de que cambiaría su percepción sobre la cuestión.

"Cada urna es un hito", ha señalado el president Puigdemont, que ha asegurado que "es evidente que somos una mayoría" pero que en todo caso, "nuestro movimiento se arma de razones cuando se pone de acuerdo en una urna ", porque, sostiene Puigdemont, el principal elemento de discusión" con dirigentes europeos" es "cuántos sois?", incidiendo en que "las mayorías imperan en Europa". Además, ha asegurado que "cada vez que nos encontramos una urna, lo tenemos que aprovechar".

¿Tercera euroorden?

Ante la posibilidad de que el Estado español emita una tercera euroorden para probar de extraditarlo, Carles Puigdemont se ha mostrado dispuesto a "afrontar" la eventualidad de una extradición, pero ha dejado claro que su propósito siempre ha sido "poder defenderme en un marco de garantías", añadiendo que tienen "argumentos" para defenderse "bien". "Ya hemos sufrido dos euroórdenes, y si hay una extradición inevitable, la afrontaré", añadió.

Sobre la posibilidad de presentarse a unas futuras elecciones al Parlament de Catalunya, que deberán tener lugar a más tardar en diciembre de 2021, cuando termina la presente legislatura, Puigdemont ha afirmado que ahora mismo quiere "terminar un ciclo político". "Ahora no me planteo nada más, pero es muy largo esto y es imposible de responder", respondió, añadiendo pero una novedad: "Si m'extraditan, pues quizá sí me podría presentar a las elecciones".

Finalmente, ha rechazado las amenazas de Pedro Sánchez de aplicar el artículo 155 aunque el gobierno esté en funciones: "Si se quiere aplicar por indicios de violencia, pues no sé qué decir. En el País Vasco hay habido más de 1.000 muertos y nunca lo han aplicado allí ".