El proyecto y las inversiones están suspendidos, pero la manifestación contra la ampliación del aeropuerto del Prat en Barcelona sigue en pie. Hacia las 12 del mediodía, más de 300 entidades, partidos políticos incluidos, se manifestarán en la calle Tarragona de Barcelona, entre las plazas de Espanya y dels Països Catalans, para exigir que la inversión de 1.700 millones de euros en infraestructuras aeroportuarias en Catalunya acabe en la papelera definitivamente.

En un inicio, antes de que el Gobierno decidiera unilateralmente suspender la inversión alegando "falta de consenso", la marcha era para protestar contra la decisión de los gobiernos catalán y español para ampliar la infraestructura aeroportuaria catalana con el objetivo de detener la aprobación del plan en el Consejo de Ministros el próximo 30 de septiembre y para "denunciar la opacidad y arbitrariedad" con las cuales los gobiernos "se están pronunciando sobre la inversión de los 1.700 millones" que implica la ampliación del aeropuerto.

Aparte de las reclamaciones generales, los organizadores de la manifestación han dividido el recorrido en tres tramos, uno dedicado a la justicia climática, un segundo dedicado a las vidas dignas y el último enfocado a la defensa del territorio.

Demandas a los gobiernos

Aunque la ampliación de El Prat no se materializará de momento, las entidades convocantes seguirán reclamando cinco cosas muy claras a los gobiernos. En primer lugar, la "paralización indefinida" de la ampliación de cualquier infraestructura aeroportuaria y de todos los planes de crecimiento de la aviación, ya que se trata "de un modelo que favorece a grandes capitales a costa de la población y del planeta", que de momento, técnicamente, no se ha producido.

En segundo lugar, los organizadores reclaman la redimensión de Aena, incluyendo el cierre de aeropuertos que ya eran deficitarios antes de la pandemia y, como consecuencia, la eliminación de los vuelos en trayectos cortos que tengan alternativa ferroviaria. La tercera demanda mira al pasado, concretamente a las compensaciones pendientes de las anteriores ampliaciones del aeropuerto de Barcelona y el puerto en respuesta al expediente de infracción abierto por la Comisión Europea.

Las dos últimas demandas reclaman impulsar diferentes políticas, concretamente sobre la soberanía alimentaria e inversiones en el Parc Agrari del Baix Llobregat e impulsar políticas para proteger el derecho a la vivienda, a la salud, a la movilidad justa y sostenible, y a un trabajo digno de los catalanes, a la vez que reclaman fortalecer el tejido productivo y económico interno con el objetivo de satisfacer las necesidades básicas del conjunto de la población.

¿Qué partidos estarán presentes en la manifestación?

Se espera la presencia, de manera oficial, de tres partidos políticos, Esquerra Republicana, la CUP y los comunes, y los dos sindicatos mayoritarios, CC.OO. y UGT. Los dos últimos han posicionado en bloque contra la ampliación desde un principio de manera frontal. Esquerra, a pesar de liderar el Govern, siempre dejó claro que la ampliación de El Prat iba inevitablemente ligada a preservar el estanque de la Ricarda y el delta del Llobregat. Por eso, ERC se situará en el tercer bloque de la manifestación, el que exigirá defender el territorio.

De hecho, la delegación de ERC estará liderada por la portavoz en el Parlamento y ex consejera, Meritxell Serret, y el vicesecretario general del partido y también ex consejero, Raül Romeva. Además también irán los diputados Pau Morales y Jordi Albert, ahora bien ERC no enviará ningún miembro del Govern a la manifestación.

Cabe recordar también que lo que dio la excusa al Gobierno para dinamitar el acuerdo sin aviso previo al Govern fueron dos tuits del president Pere Aragonès en los que exigía a Aena que rectifique su plan para ampliar el aeropuerto de El Prat para evitar dañar el espacio protegido de la Ricarda.

Todo vino después de que saliera a la luz el Documento de Ordenación y Regulación Aeroportuaria (DORA) 2022-2026 de Aena, que especifica que "la ampliación del campo de vuelos, y concretamente de la pista 07R/25L (la tercera pista de El Prat) y sus rodamientos asociados hacia el este, manteniendo el umbral para aterrizajes en la ubicación actual, afectaría zonas de la Red Naturaleza 2000".

"Exigimos explicaciones y la rectificación de un DORA que estropea la zona protegida de la Ricarda. Cada paso que se dé tiene que incluir el compromiso de consenso. Preservar los espacios naturales no es una opción, es una obligación no negociable", sentenció Aragonès.

Comunes y CUP, radicalmente en contra

La posición de ERC, favorable a la ampliación, pero con muchos condicionantes, sobre todo con respecto a la defensa del territorio, es bastante diferente de la de la CUP o los comunes, que simplemente están en contra, rotundamente, de la ampliación del aeropuerto. De hecho, la CUP ha mostrado siempre su rechazo al acuerdo entre el Estado y la Generalitat para la ampliación de la pista del aeropuerto de El Prat del pasado dos de agosto asegurando que "es un atentado ecológico y climático".

De hecho, los cupaires consideran "incompatible" las inversiones que se tendrían que hacer en el aeropuerto con la reducción de emisiones, además de que "no respeta el territorio".

Por la parte de los comuns, su líder y alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no irá a la manifestación después de hacer campaña muy activamente contra la ampliación, incluso fue a visitar la Ricarda con la ministra de Trabajo Yolanda Díaz cuando esta visitó Barcelona.

Además, la campaña contra el aeropuerto de la alcaldesa no se para aquí, puesto que afirmó que la ampliación del Prat no es más que un "aeropuerto de unicornios" en un artículo publicado en El País. En su escrito, Coláis critica que el acuerdo se cerrara "en secreto, en pleno mes de agosto y de espaldas a la ciudadanía" y que, de momento, "las únicas certezas" del acuerdo son "que implica destruir la zona protegida de la Ricarda, aumentar quieres y sumar 20 millones de pasajeros, cosa que eleva las emisiones".

Al mismo tiempo, la alcaldesa asegura, también en el mismo texto, que la ampliación no interesa "a la mayoría de la ciudadanía de Catalunya" y recuerda que el ayuntamiento tiene el compromiso de reducir las emisiones "en un 50% las emisiones para el año 2030" y que, según la Agencia de Salud Pública de Barcelona, se cifra "en 1.000 muertes anuales las que se producen por la contaminación".