El Partido Popular y el Partido Socialista Obrero Español han pactado reformar las euroórdenes para evitar repetir casos como el del president en el exilio, Carles Puigdemont. El Congreso de los Diputados aprobó el jueves pasado, con 216 votos a favor, 63 en contra y las abstenciones de Vox, una resolución presentada por los populares que pide "la reforma de la euroorden" durante la presidencia española de la Unión Europea. Con esta modificación pretenden prevenir quebraderos de cabeza judiciales internacionales como los que el president está liderando contra el estado español. La propuesta de los populares se justifica como una medida de "reforzamiento del estado de derecho" para ser incluida en la agenda comunitaria una vez España ostente la presidencia europea durante el segundo semestre del próximo año. Según recopila el ABC, los socialistas han asegurado que el presidente español, Pedro Sánchez, quiere lanzar la "iniciativa política" para que la reforma empiece a andar. En cambio, la formación de Alberto Núñez Feijóo quiere "potenciar el automatismo" de las euroórdenes para evitar que un tribunal de otro país europeo impida la entrega inmediata de un exiliado, como es el caso de Puigdemont, amparándose en "subterfugios legales".

PP Euroorden caputra
Captura de la propuesta de resolución del Partido Popular

"Impulsar el papel de España en la UE, especialmente a través de una agenda ambiciosa con ocasión de la presidencia española de la Unión que contemple, entre otras medidas, el reforzamiento del estado de derecho con la reforma de la euroorden", se desprende de la propuesta de resolución a la mesa del Congreso de los Diputados. Es decir, el PSOE habría acordado con el PP modificar las euroórdenes aprovechando que tendrán la presidencia europea, para así intentar que no se repitan situaciones como las vividas con el president, que varios países europeos se han negado a entregarlo a la justicia española. La iniciativa fue incluida dentro del paquete de resoluciones del debate sobre el estado de la nación española, aunque pasó inicialmente desapercibida. Se encuentra dentro del acuerdo llegado entre los de Feijóo y los de Sánchez sobre política exterior y defensa, donde se incluye reforzar y modificar las vías europeas desde España para que no se vuelva a repetir otro caso Puigdemont.

 

La presidencia del Consejo de la Unión Europea es rotativa. Esta se asume por turnos de seis meses entre los diferentes estados miembros de la UE. Durante un semestre, el estado de turno preside las sesiones a todos los niveles del Consejo, contribuyendo a garantizar la continuidad del trabajo de la Unión en esta institución. En el caso de España, le corresponde entre los meses de julio, agosto, septiembre, octubre y diciembre de 2023, donde este propondrá los temas y principales asuntos que abordará el Consejo. En el caso de España, según el pacto establecido entre el ejecutivo español y el PP, se apostará por reformar las euroórdenes aprovechando la presidencia para combatir circunstancias judiciales como las de Puigdemont y los exiliados.

Luz verde a una nueva euroorden

El último movimiento en la justicia europea sobre el asunto Puigdemont ha sido hace unos días, y no ha traído demasiado buenas noticias para el president. El abogado general del TJUE Jean Richard de la Tour apoyó a Pablo Llarena. El magistrado asegura que Bélgica no puede entrar a valorar si el Supremo es la autoridad competente para juzgar al conseller Puig y que para argumentar un riesgo de vulneración de un derecho fundamental tiene que demostrar deficiencias sistémicas y generalizadas en el funcionamiento del sistema judicial español. De la Tour aseguró que el juez instructor puede volver a presentar la euroorden en Bélgica contra Puig si se demuestra que la anterior se denegó contraviniendo el derecho de la Unión.