En la dicotomía presentada por Oriol Junqueras, entre ERC o Ciudadanos, el Gobierno escoge las dos. Este viernes, María Jesús Montero no ha querido dar por rotas las relaciones con ERC, sino todo lo contrario: cuentan con ellos para los presupuestos que elaborarán para el año con que viene. Eso sí, la portavoz del Ejecutivo ha abierto la puerta a "ampliar la mayoría" de la investidura de Pedro Sánchez con otras formaciones que quieran subir al carro. No ha citado el acuerdo con Ciudadanos de esta semana, pero en estos momentos es el único dispuesto a negociar su apoyo a La Moncloa.

En rueda de prensa desde La Moncloa este viernes al mediodía, la dirigente socialista ha defendido que el hecho de haberse desmarcado del Gobierno no hace que ERC deje de ser un aliado con el que trabajar. Acto seguido, sin embargo, ha asegurado que "la mayoría que este gobierno contó para la investidura y las diferentes leyes tiene vocación de poder ampliarse" a cualquier formación que quiera dialogar y establecer acuerdos con el gobierno de coalición.

De esta manera, el Gobierno quita hierro a la ruptura evidenciada el miércoles en el Congreso de los Diputados. "Por descontado que cualquier formación política en un momento determinado puede no compartir determinadas iniciativas políticas, pero eso no significa en absoluto que no pueda compartir otras", ha dicho Montero. En este contexto, ha defendido que el decreto de alarma aprobado, con las enmiendas del PNV, ya prevé la "cogobernanza", evaluando de forma conjunta la situación de los territorios para la desescalada y estableciendo que los presidentes de las comunidades autónomas "son los que ostentan la responsabilidad de aplicar las medidas".

Es por eso que La Moncloa también cuenta con ERC para los presupuestos generales del Estado del 2021, un proyecto que, según ha anunciado Montero, será presentado en el Congreso de los Diputados "en tiempo y forma cuando se conozca la profundidad de la crisis económica" posterior al coronavirus.

Más prórrogas

En consonancia con lo que ya ha ido manifestando La Moncloa durante las últimas horas, la portavoz del ejecutivo ha defendido que habrá que mantener el estado de alarma "mientras la población se tenga que mover con orden y no podamos volver hacia aquella nueva normalidad". En este sentido, no ha descartado la "solicitud de nuevas prórrogas", en plural, porque "es el instrumento adecuado en el ordenamiento jurídico" que permite limitar la libertad de movimiento. Aunque vaya incorporando adaptaciones, no se plantean levantarlo "hasta que no podamos hacer de forma definitiva que todos se desplacen con total normalidad".

Criterios científicos y no políticos

La portavoz del Gobierno no ha querido adelantar qué territorios avanzan a la fase 1 en el proceso de desescalada y cuáles no. Lo ha dejado en manos del ministro de Sanidad, Salvador Illa, que comparecerá esta tarde en La Moncloa. Eso sí, Montero ha subrayado que las decisiones se adoptarán bajo criterios científicos y no políticos. "Aquí no caben ni intereses partidistas ni cálculos electorales", ha asegurado. Toda la atención está en el principal foco de contagio, la Comunidad de Madrid, que a pesar de estar siendo duramente golpeada por la pandemia ha pedido avanzar en el desconfinamiento. La presidenta Isabel Díaz Ayuso ha admitido que priorizan la economía en este momento.

 

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