Uno de los rostros que se ha convertido en habitual en los medios de comunicación con la crisis del coronavirus es el del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón. Hace semanas que comparece para dar cuenta de la evolución de la enfermedad y el impacto en el estado español. Pero sus previsiones no se han cumplido. El pasado 31 de enero aseguró el convencimiento de que en España no habría "más allá de algún caso diagnosticado". "Esperamos que no haya transmisión local. Si la hay, estará muy limitada y muy controlada", pronosticó.

En aquella comparecencia aseguró que, a pesar de la falta de información existente, había ya indicios de que la enfermedad seguía "sin ser excesivamente transmisible" y que parecía que tenía "posibilidades de empezar a remitir". Su conclusión era que se darían "pocos casos" en el estado español y restó importancia a la alerta que acababa de dictar la OMS. En los días siguientes avalaría la participación de la ciudadanía en convocatorias multitudinarias como la manifestación del 8-M.

A medida que han pasado las semanas, los reproches por el error de valoración del responsable de Alertas Sanitarias no ha hecho más que multiplicarse en las redes.