El boicot promovido por el PNV en el Congreso ha prosperado finalmente y el Partido Popular (PP) se ha visto forzado a retirar la candidatura del exministro de la Operación Catalunya, Jorge Fernández Díaz, para presidir la comisión de Exteriores. Según ha podido saber El Nacional, los vascos consiguieron la colaboración del PDECat para presionar hasta altas horas de la noche de este martes para que el PSOE no asistiera a la votación de la comisión. Ante la posibilidad de sufrir un escarnio público, el PP ha decidido retirar la candidatura del exministro y el expresidente Jesús Posada podría volver a presidir el órgano, como solía hacer.

Es por ese motivo que el propio PP ha propuesto a la comisión aplazar la decisión con el objetivo de que el PSOE "recapacitara", según explican fuentes populares a El Nacional. Con esta idea, el presidente en funciones del órgano, el socialista Eduardo Madina, ha decidido someter a votación el aplazamiento. Parece que una serie de grupos habrían aceptado esta idea y la propuesta ha contado con el apoyo del Partido Popular, PSOE, Unidos Podemos, Ciudadanos, ERC y el PDECat. Como adelantaba este diario, desde Esquerra querían votar al candidato ofrecido por parte de Podemos, Pablo Bustinduy, ante la falta de alternativa conjunta, pero finalmente se han sumado al boicot.

Precisamente, se podría apreciar un choque de estrategias cruzadas, con consecuentes réditos electorales, entre Unidos Podemos y el PSOE por una parte, y entre ERC y el PDECat por otra. Fuentes republicanas explicaron a este diario desconocer si PNV y los demócratas catalanes irían a la comisión, por lo que se habían centrado en el candidato alternativo como forma de protestar. A su vez, el portavoz de la formación morada Íñigo Errejón, y el mismo Bustinduy, afirmaban que el PSOE no quería presentar otro candidato, que habría contado con los votos del partido de Pablo Iglesias.

El tuit de Sánchez y Munté

Otra teoría –que fuentes socialistas no quieren confirmar a este diario– es que el tuit del ex secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, este miércoles por la mañana haya detonado la estrategia del PSOE. Esta lectura se debería hacer en clave interna, ante la posibilidad de que Sánchez se haga con el control del liderazgo de Ferraz otra vez. Según explican fuentes parlamentarias a El Nacional, la estrategia del PNV y el PDECat estaba encontrando dificultades para prosperar. La cuestión es que el tuit de la portavoz del Gobierno y miembro de los demócratas catalanes, Neus Munté, esta mañana –después de una jornada de presión– contrarresta la idea de que el efecto de los nacionalistas es lo que habría llevado a este resultado finalmente.

Aun así, los socialistas no querían romper el acuerdo con el PP de respetar al candidato propuesto por ellos en una presidencia que le correspondía. Pero la presión de las últimas horas –y la amenaza de que Unidos Podemos se erija como la oposición real al PP– les ha llevado a actuar en este sentido. Según explican fuentes socialistas, tanto desde la gestora del PSOE como desde el grupo en el Congreso se ha comunicado esta mañana al gobierno y al PP que el PSOE estaba dispuesto a presentar a un candidato alternativo para presidir la comisión con el compromiso que si hubiera salido elegido, hubiera dimitido con la idea de que el PP propusiera a otro.

El rechazo de los grupos no se ha hecho esperar en la comisión. El principal argumento esgrimido entre la mayoría de ellos ha sido el hecho de que el exministro hubiera estado involucrado en las escuchas de la Operación Catalunya o el presunto hecho de que hubiera emprendido una "policía política", como acostumbran a defender la formación morada y los socialistas. En este caso, la formación de Albert Rivera se ha añadido al boicot, principalmente porque no encuentran conveniente que el presidente Mariano Rajoy "recoloque" a exministros en presidencias de la cámara, como explicaba el portavoz Juan Carlos Girauta.

"Como un jarrón chino"

El PP busca recolocar al exministro involucrado en las escuchas de la Operación Catalunya, Jorge Fernández Díaz, en otra comisión en el Congreso, una vez ha sido rechazado y retirado para la presidencia de la de Exteriores. Según ha podido saber El Nacional, a partir de fuentes socialistas y del PDECat, se buscaba cederle el puesto en la del Tribunal de Cuentas, y por este motivo, el PP ha pedido pedir también aplazamiento de esta comisión, como así se ha producido sin dar explicaciones una vez la presidenta en funciones de la mesa lo ha comunicado a los diputados del órgano en cuestión.

Fuentes socialistas indican que habían advertido al PP que si lo presentaban, propondrían candidato alternativo con el compromiso de dimitir cuando el PP propusiera otro nombre. La cuestión es que la persona para esta otra comisión era otra. La estrategia popular ha desconcertado a los grupos, hasta el punto de que un diputado de Unidos Podemos aseguró que no era lícito buscar otra salida para el ministro "como si de un jarrón chino" se tratara. Algunos diputados también han hecho sorna sobre que ya sólo quedaban dos comisiones este miércoles, pero el PSOE se niega en rotundo a apoyarle.

"Ninguna cuestión personal"

Ante las críticas, Jorge Fernández ha subrayado que está a disposición del Grupo Popular para la decisión que tome. El exministro ha asegurado en el pasillo que la cámara que no pondrá "problemas" si su partido decide apartar su candidatura a cualquier Presidencia, porque él no lo habría pedido, ni se habría puesto en política para obtener cargos, ni tampoco quiere hacer de ello una cuestión personal. Pero el extitular de Interior ha tachado al PSOE "de impresentable" por no haber cumplido el acuerdo en virtud del cual los grupos no deciden el candidato de ningún otro para las presidencias repartidas.