El mensaje del Gobierno desde el estallido del CatalanGate se mantiene firme, sin cambiar ni una coma desde que la portavoz Isabel Rodríguez se pronunció el martes, al día siguiente de la publicación de la investigación del CitizenLab. Hoy, la ministra socialista ha querido reiterar que desde la Moncloa no hay "nada que esconder en todo este asunto", como ya ha ido diciendo en los últimos días, destacando que el Estado es "un país democrático y de derecho". Por eso, ha hecho un llamamiento a la "tranquilidad absoluta" para la sociedad catalana, pero también para el conjunto de la sociedad española que pueda sentir "zozorba o preocupación" al escuchar las informaciones referidas a un espionaje masivo a, como mínimo, 65 políticos independentistas. "En este país se respetan los derechos y las libertades individuales. Solamente se pueden intervenir con amparo judicial", ha recordado, mientras ha repetido su mantra en los últimos días, "transparencia y colaboración", aunque el Gobierno todavía no ha hecho ningún gesto en este sentido. Solamente Unidas Podemos, el socio minoritario de la coalición, ha firmado la petición para crear una comisión de investigación. En este sentido, en su intervención en La 1, ha pedido no frivolizar con la estabilidad del gobierno de coalición.

Aunque el president Aragonès ha asegurado que la relación de confianza con el Gobierno está muy dañada después del estallido de este escándalo, Rodríguez ha afirmado que el Ejecutivo quiere mantener la "relación de confianza" con la Generalitat y que está en disposición de hacer un esfuerzo para evitar que esta se rompa. La portavoz dice que desde la Moncloa están dispuestos a dar este paso adelante "si es necesario", ya que después de las últimas informaciones cree que puede haber fracciones. Así, defiende que se pueden incrementar todas las acciones que sean oportunas para recuperar esta normalidad. "El gobierno de España quiere seguir en esta relación de confianza, de normalidad, diálogo, conversación con ningún otro objetivo que recuperar la tranquilidad de los catalanes" y no "dar pasos atrás" en la relación con el Govern.

Unas declaraciones insatisfactorias

Mientras tanto, en una entrevista en la Ser Catalunya, el president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha considerado que las explicaciones que se han dado desde el Gobierno no son, ni de lejos, satisfactorias. Concretamente, se ha referido a las palabras de la ministra responsable de Defensa, Margarita Robles sobre el CNI, después de que este organismo haya centrado las críticas de los independentistas: "No solo son insuficientes; son contraproducentes para poder recuperar un mínimo de confianza. ¿Decir que el CNI no se puede defender? Y ¿los ciudadanos no se tienen que poder defender?", ha lamentado.

Y es que el president ha querido remarcar que "ante las evidencias" del CatalanGate "se tienen que proteger los derechos de los ciudadanos y de las instituciones". Es por eso que Aragonès sigue exigiendo al presidente español, Pedro Sánchez, y a los miembros de su gobierno "explicaciones y transparencia" para poder saber "quién ordenó el espionaje, qué se espió y por qué, y quién lo sabía y no actuó", para poder pedir las dimisiones o acciones políticas que se considere. El president, en este sentido, pide a Sánchez "un compromiso claro para aclarar la situación". "Eso no se soluciona con palabras y solamente con una reunión. Es grave. Necesitamos garantías que no está pasando ahora ni pasará en el futuro", ha avisado Aragonès, remarcando que ya le ha reclamado al presidente un cara a cara.