La noticia difundida por la prensa belga de que el president Carles Puigdemont habría alquilado una casa de 550 m² en la localidad belga Waterloo por 4.400 euros al mes, ha provocado numerosas críticas. Aunque el entorno del president no confirma el contrato de alquiler, el españolismo ha salido en tromba a criticar los "lujos" del president.

La casa que habría alquilado Puigdemont está en las afueras de la localidad belga, a 20 km de Bruselas. Cuenta con 6 dormitorios, 3 baños, una cocina espaciosa y luminosa, un garaje con capacidad para 4 coches y una terraza de 100 m².

La vivienda que habría alquilado el president, sin embargo, no disfruta de tantos lujos como las de algunos otros políticos del Estado. Varios representantes o exrepresentantes han protagonizado fuertes polémicas cuando han salido a la luz las casas en las que viven.

Uno de los últimos casos ha sido el de Albert Rivera, que este pasado mes de noviembre se mudó a Pozuelo de Alarcón, el municipio más caro de España. En su caso, la casa no sería tan grande como la de Puigdemont, ya que tendría 150 m², divididos en dos plantas, un amplio jardín, dos plazas de garaje y superaría el millón de euros.

Felipe González y Aznar, los más polémicos

Ahora bien, uno de los casos más esperpénticos fue el del expresidente español Felipe Gonázalez. El año 2010 se hizo público que el exmandatario tenía una mansión en la exclusiva playa de Jbila en Tánger, en Marruecos, en primera línea de mar. Sin embargo, finalmente Felipe Gonázalez no tenía una mansión, sino unos terrenos de 5.000m² valorados en 2,5 millones de euros que acabó vendiendo a la familia real de Arabia Saudí.

Por otra parte, cuando José María Aznar abandonó la Moncloa, él y su esposa, Ana Botella, se mudaron a la urbanización Monte Alina, también en Pozuelo de Alarcón, como Albert Rivera. En el caso del expresidente popular, sin embargo, hablamos de una casa llena de lujos. Unos 600m² repartidos en dos plantas y uno subterráneo, un jardín de 1.600m², y valorada en 1.8 millones de euros.

Finalmente, otra de las polémicas saltó en 2009, cuando el entonces president de la Generalitat José Montilla adquirió un lujoso chalet en Sant Just Desvern por dos millones de euros.

¿Dónde viven los políticos en activo?

Aunque estos han sido los casos más polémicos que han salido a la luz, otros políticos viven en casas que se podrían considerar lujosas.

De políticos en activo, destaca el caso del presidente Mariano Rajoy, que a pesar de vivir actualmente en el Palacio de la Moncloa, tiene varias propiedades. Entre ellas, un piso de 70m² en el paseo de la Castellanana, una casa en Sanxenxo (Pontevedra) y un dúplex en Aravaca, a unos diez minutos en coche de Madrid. Esta última propiedad está dentro de una urbanización con vigilancia las 24 horas del día, dos piscinas y pista de tenis. Se trata de un piso de 279 metros, que estaría valorado en 902.000 euros.

Por otra parte, la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, es propietaria de un lujoso chalet con piscina y jardín en Fuente del Berro, una de las zonas más selectas de la capital española. La propiedad tendría 231 m², estaría ubicada cerca del parque del Retiro, tendría vigilancia las 24 horas y un precio de mercado que rondaría los 866.400 euros.

Como Rivera y Aznar, el líder del PSOE, Pedro Sánchez, también escogió el exclusivo Pozuelo de Alarcón para ubicar su residencia. En su caso, sin embargo, viven en un piso.

Finalmente, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, vive en un barrio de Vallecas, en Madrid, en un piso que heredó de su madre cuando murió la suya suelta. El inmueble, de 60 metros, tiene un precio aproximado de 83.000 euros.