La decisión del TSJC de mantener las elecciones del 14-F convocadas mientras no toma una decisión sobre los recursos presentados y la condena por desobediencia contra el conseller de Exteriores, Bernat Solé, por su participación en el 1-O como alcalde de Agramunt demuestran, según la presidenciable de JxCat, a Laura Borràs, que "la justicia española no inhabilita, reprime".

Para Borràs, los movimientos judiciales que se han producido esta mañana demuestran que "el Estado quiere inhabilitar la democracia en Catalunya" y que para conseguir este objetivo "hay una alineación de poderes". "Deben querer que nos arrepintamos para el 1-O y no lo haremos. Nos enorgullecemos", ha subrayado la candidata además de insistir en que se trata de una "represión inaceptable" y que se está generando "caos", "máxima incierta" e "inseguridad jurídica" con un escenario electoral insólito.

La crítica decisión del TSJC sobre las elecciones

Borràs ha denunciado que con la decisión del TSJC se ha suspendido el decreto de las elecciones, y por lo tanto, a tres semanas de la convocatoria ahora vigente, no se sabe si las elecciones serán el 14 de febrero, o si se fijará una nueva fecha, o si será el 30 de mayo.

Aunque ha asegurado que se están se está intentando poner "todo tipo de obstáculos" por votar, ha asegurado que la maquinaria electoral de Juntos está a punto para afrontar, si hace falta, los comicios el 14 de febrero.

Un 155 permanente

Borràs ha recordado que los comicios del 21-D ya lo fueron convocados desde el Gobierno, por lo cual ha insistido en que Catalunya vive en un 155 permanente y que "la misma justicia que quería inhabilitar el 1-O es la que ahora está decidida a inhabilitar que los catalanes decidan cuándo hace las elecciones".

La justicia española parece decidida a decretar cuando tenemos que votar. El próximo paso ya será que nos diga a quién tenemos que votar. Los tribunales tendrían que garantizar la democracia y parece que lo que quieren es interferir en la democrática en Catalunya", ha remachado.

En relación a la encuesta del CIS ha evitado entrar en valoraciones argumentando y ha apuntado que en este sondeo siempre salen perdedores, lo cual ha atribuido a que a menudo la muestra es sesgada.