Sorpresa en el Parlament. El decreto que endarreria la entrada en vigor del aumento de la tasa turística ha sido rechazado por la cámara catalana y esta (que en algunos casos duplica e incluso triplica la cifra que había hasta ahora) entra en vigor. En febrero, Govern y Comuns pactaron un primer decreto para aumentar el impuesto que pagan a los turistas por cada noche que duermen en Catalunya que tenía que entrar en vigor el 1 de mayo y el sector se sublevó, con críticas por todo el país. ERC, el otro socio del Govern, aseguró que si bien estaba de acuerdo con aumentar la tasa creía que el decreto en cuestión no estaba bien hecho y acordó con el Govern tramitarlo como proyecto de ley, tal como había pedido el Consell de Garanties Estatutaries, aparte de registrar su propia propuesta de que los comunes veían con malos ojos. A su vez, el Govern aprobó otro decreto que retrasaba su entrada en vigor hasta que el Parlament no aprobara definitivamente. Se esperaba que eso sucediera en octubre.
Esta tarde, el Parlament ha aprobado el primer decreto (con los votos a favor de PSC, ERC y los comuns) y también tramitarlo como proyecto de ley, tal como estaba previsto, solo con el rechazo del PP. La sorpresa se ha producido cuando el segundo decreto que retrasaba la entrada en vigor del primero hasta el otoño ha quedado rechazado con los votos en contra de Junts, PP, Vox, los comunes, la CUP y Aliança Catalana y un diputado de ERC. Es decir, de todos los partidos menos PSC y ERC. El objetivo de los comunes era que el decreto pactado con el Govern entrara en vigor tanto pronto como fuera posible y así pasará. Durante su discurso, David Cid, ha lamentado que se habían perdido hasta 59 millones de euros con su retraso. "Los comunes hemos votado lo que hemos dicho que votaríamos, hemos sido coherentes y no queríamos que la entrada en vigor se retrasara", ha defendido al portavoz desde el atril después del alboroto generado. La CUP ha votado en contra del decreto pero también del atraso de su entrada en vigor.
Junts pide al Govern que derogue el decreto aprobado
De esta manera, la entrada en vigor inmediata de la tasa se ha aprobado con los votos de partidos (Junts, PP, Vox y Aliança Catalana) que durante el debate han posicionado en contra de este aumento y que han acusado al Govern de institucionalizar la turismofobia de la mano de los comunes y atacar un sector imprescindible para el país como es el turístico, que representa un 12% del PIB. Desde Junts han advertido que el Govern tiene un problema con sus socios y que el Ejecutivo no les puede cargar la responsabilidad que supone la entrada en vigor de la nueva tasa turística, ya que su voluntad era que retiraran el decreto, poniendo el foco que este nuevo impuesto duplicado no está consensuado con el sector. Desde el atril, el diputado Antoni Castellà ha pedido al Govern que lo derogue mientras que desde de ERC, Albert Salvadó, han reclamado a la consellera Alícia Romero que aclarara cuál era la situación.
Antes de que se produjera el enredo de la votación, Romero había defendido el aumento del impuesto. Así, la consellera ha asegurado que el sector turístico "va bien y genera mucho empleo y riqueza en nuestro país, pero pueden ayudar a compensar algunas de las externalidades que provoca". De esta manera, ha defendido seguir dando apoyo en el sector, que se opuso de lleno al aumento de esta tasa cuando se anunció el acuerdo con los comunes para el decreto, este tiene que aportar un poco más", recordando que otras ciudades de Europa también han incrementado el impuesto.