Paréntesis en la agenda institucional de Pere Aragonès. Mientras en Salamanca estaba en marcha la conferencia de presidentes autonómicos, el jefe del ejecutivo catalán y coordinador nacional de ERC estaba en Suiza, donde se ha reencontrado con la secretaria general de su partido, Marta Rovira. La cita no se había anunciado previamente y coincide con el foro que ha organizado Pedro Sánchez para escenificar una imagen de unidad autonómica.


Aragonès y Rovira en Ginebra. / A. Carbonell

El de hoy es el primer contacto presencial entre Rovira y Aragonès desde que este último es president de la Generalitat. Según ha informado Esquerra Republicana a través de sus redes, los dos dirigentes de la formación han coincidido en subrayar que "la amnistía y la autodeterminación son el camino para hacer posible el retorno de las personas exiliadas". El viaje del president a Ginebra, que ha hecho acompañado del jefe de su oficina, Sergi Sabrià, llega un mes y medio después del primer desplazamiento que hizo a tierras europeas. Fue a Waterloo, para reunirse con Carles Puigdemont.

Mensajes implícitos

Fuentes del entorno de los dos líderes de ERC expresan que ha sido "emocionante". La imagen viene cargada de contenido político. Implícitamente es un mensaje para el Gobierno, específicamente para Pedro Sánchez, que en las últimas horas había intensificado la presión sobre Aragonès para que se repensara su negativa a participar en la cumbre de presidentes de Salamanca.

24 horas antes del encuentro salmantina, Aragonès justificó su rechazo a la invitación de la Moncloa. "Es evidente que mañana no se decidirán los fondos europeos", dijo. Según el guion remitido por el Gobierno, en la conferencia se abordará el reparto de los fondos Next Generation. Desde la Generalitat, sin embargo, se mantiene que una cuestión tan compleja como la gestión de esta partida, que la UE ha inyectado a los estados miembros para financiar proyectos transformadores que los ayuden a reponerse de la crisis económica, no se puede dirimir "en una intervención de cinco minutos de cada presidente". El objetivo del Govern es que este tema se discuta en la reunión de la comisión bilateral Estado-Generalitat del lunes, pero desde el Gobierno se resisten a aceptar que este sea uno de los puntos del orden del día.


Aragonès y Rovira con mascarilla en la calle. / A. Carbonell

Más allá de la pugna con Madrid, la fotografía que ERC ha difundido sobre el reencuentro de Aragonès y Rovira incorpora otro mensaje. Después de la polémica en torno a la instantánea de la paella de Pilar Rahola en la Catalunya Norte, en la cual además de Puigdemont participó el vicepresident Puigneró, en las fotos de los dirigentes de ERC los dos aparecen en todo momento con mascarilla, incluso cuando pasean por la calle.

En la imagen principal, Aragonès y Rovira en Ginebra. / A. Carbonell