El alcalde de L'Ampolla (Baix Ebre), Paco Arasa, histórico militante de CDC y del PDeCAT, ha pedido el voto para Junts per Catalunya después de una comida con el conseller Josep Rull.

A través de una carta publicada en las redes sociales ha pedido el voto para Junts para las elecciones del domingo 14 de febrero, según ha explicado Imagina Ràdio.

En el escrito, Arasa ha expresado a la carta que "todos sabéis mi procedencia política, he militado en Convergència Democràtica, y hasta hace poco al PDeCAT, y eso me ha creado dudas en cuál tendría que ser mi posicionamiento ante estas elecciones". Seguidamente, explica que el conseller Josep Rull lo ha acabado de convencer después de haber celebrado uno comido con él el pasado miércoles en L'Ampolla.

"Este pasado miércoles se me desvaneció todas las dudas después de compartir, tuve la suerte y la satisfacción de compartir, durante 2 horas, una comida con el exconseller Josep Rull", ha expresado.

El alcalde ha defendido que lo que le ha motivado a apoyar el partido de Borràs ha sido escuchar la crudeza sufrida por el conseller y ha destacado las palabras de Rull: "qué sentido tendría todo, y de qué serviría todo el esfuerzo y sacrificio de qué que están haciendo los que están en la prisión y en el exilio, si fuera presidente el candidato socialista?… o la clave de la gobernabilidad cae en manos de partidos constitucionalistas".

Segundos Junts, con este paso adelante de Arasa y el de otros alcaldes del territorio, como el alcalde de Arnes, Joaquim Miralles Pegueroles, o la alcaldesa de Palma d'Ebre, Marina Rojals, la formación empieza a coger bastante en el territorio ebrense.

El independentismo se impondría el 14-F ante el insuficiente avance de Illa

El muro independentista, a pesar de las serias fisuras que presenta, resistirá el embate del llamado efecto Illa a las elecciones catalanas del 14-F. El muro independentista, pese a las serias fisuras que presenta, resistirá el embate del llamado efecto Illa en las elecciones catalanas del 14-F. El PSC sería la primera fuerza, con 33-34 escaños pero Junts, con 31-34 y ERC, que le sigue, con 29-32, aguantan sus resultados del 2017, disputan la victoria a los socialistas y podrían renovar la mayoría absoluta independentista con la CUP, que vuelve a dispararse con 9-11. Así lo refleja una encuesta de Feedback para ElNacional.cat. a ocho días de la cita con las urnas.

El sondeo, de 800 entrevistas telefónicas realizadas en la primera semana de la campaña electoral, entre el 1 y el 5 de febrero, refleja asimismo el hundimiento de Ciudadanos, que fue primera fuerza en las elecciones del 21 de diciembre del 2017, y ahora solo retiene 9-10 de los 36 asientos que obtuvo, y la irrupción de la ultraderecha, Vox, en el nuevo Parlament, con entre 6 y 9. En Comú Podem mejoraría, con 8-10 y el PP no levanta cabeza: 3-4. El PDeCAT, el heredero directo de la extinta Convergència, quedaría fuera del Parlament.

La muestra contempla una participación del 61,22%, muy por debajo del histórico 79,09% alcanzado en las elecciones el 21-D, y eleva a un 30,7% la previsión de votantes indecisos. Lo que, unido a las dudas sobre la seguridad de la votación en plena tercera ola de la pandemia de coronavirus pese a las medidas sanitarias reforzadas en los colegios electorales, dibuja un marco de máxima incertidumbre. Lo evidencia también el hecho de que, si bien en la pregunta de “a quién cree que votará” el 14-F, se impone con claridad el PSC, un 38,2% de los encuestados responde, no obstante, que cree que será ERC el partido "que ganará" los comicios. Un 17,6% creen que ganará el PSC y un 7,9%, Junts.

 

Imagen principal, Paco Arasa / L'Ebre al dia