La tensión en la batalla por el liderazgo de Podem ha escalado este lunes un grado más. Albano Dante Fachin, cara visible de la próxima candidatura Ho Podem Tot, ha acusado al diputado d'En Comú Podem y afín a Pablo Iglesias, Raimundo Viejo, no haber hecho nada para “abrir debates”. Viejo se había reivindicado, en el acto de presentación de la plataforma Impulsant el canvi, como un hombre de “visión global” mientras que decia que Fachin hace política “desde anteayer”.

La respuesta de Fachin, en una dura carta a la militancia de Podem a la que ha tenido acceso El Nacional, asegura que “tener trienios y sexenios no parece ningún mérito”, en referencia a la experiencia política. El aval a Impulsant el canvi de personas como Marc Llaó, que han sido miembros “destacados del Consejo Ciudadano Autonómico catalán paralizado desde la dimisión de Gemma Ubasart”, dice que lo demuestra. ¿“Por qué aquellos que han tenido en sus manos las herramientas para abrir los debates, para hacer de Podem una organización abierta, viva y participativa no lo habían hecho hasta ahora?", se pregunta Fachin.

Que el proyecto que encabeza Viejo se presente en su manifiesto como “el punto de partida” es “un error” para el diputado al Parlament. “En el territorio hay centenares de personas ya han empezado a trabajar para abrir un debate que la organización no ha sabido (o no ha querido) abrir durante meses”, ha clamado. En este sentido, Fachin señala que no tiene ninguna intención de sumarse. Es más, reta Viejo a enfrentarse a él en unas primarias, porque es "la prueba de consenso mayor". Un pacto entre ellos dos dice que sería "un pacto entre cúpulas para asegurarse un sitio".

'Impulsant el canvi'

El proyecto de Raimundo Viejo se presentó este sábado en la Casa del Mar. Hacía semanas que sonaba su nombre de cara a representar al oficialismo de Madrid en una convocatoria para renovar los liderazgos de los morados en Catalunya. Y la apertura del debate sucesorio por parte de Fachin, muy criticado por el entonces secretario de organización de Podemos Sergio Pascual, ha ayudado a que Pablo Iglesias mueva pieza.

Las diferencias entre los proyectos de Fachin y Viejo, que no son los únicos que se han puesto en marcha, pero sí los que tienen más posibilidades de hacerse con el control de la formación, son palpables. Sobre todo en cuanto a la conexión con Madrid, pero también sobre su postura de cara a integrarse o no en la plataforma política de izquierdas que en enero planteaba la alcaldesa de Barcelona, ​​Ada Colau.

Concretamente, desde la candidatura avalada por Iglesias se pone el freno de manera descarada a Colau, mientras que los de Fachin la ven con mejores ojos, a la espera de las conclusiones del debate que llevan semanas teniendo en sus encuentros. Y es que en el manifiesto del proyecto de Viejo se afirma que "sin la apuesta de Podem por Barcelona En Comú, el cambio aún no habría comenzado" y que "el avance de Ciudadanos el 27S no sólo se produjo gracias a los errores eventuales de CSQEP, sino también porque hubo quien se creyó al margen de la responsabilidad de frenar la marca blanca de la derecha centralista ", en referencia a que los comunes barceloneses desestimaran de participar.

Sobre la conexión con la dirección estatal, si bien ambas candidaturas dicen querer la plena soberanía, también jurídica, de Podem en Catalunya, mientras los de Viejo remarcan los acuerdos de Vistalegre, donde se enfatizaba en la centralización del poder, y no dirigen crítica alguna por la gestión de la crisis catalana por parte de Madrid, los de Fachin sí han cargado duramente contra ello tanto en su manifiesto como en sus declaraciones. "Nuestras decisiones las debemos tomar desde Catalunya", decía Fachin en la presentación de Ho Podem Tot. "No se ha fomentado la participación y, lo más importante, no ha habido espacios de debate real", critica en la carta de hoy.