A muchos les puede no sorprender este titular, pero hubo un día en que el actual líder de Vox, Santiago Abascal, quiso emular al dictador Francisco Franco. Fue el mes de mayo del 2018, cuando Abascal participó en la carrera 101 de Ronda (Málaga), la cual está inspirada en una marcha que Franco y sus hombres hicieron en julio de 1921 durante la guerra contra los rifeños.

Desde la parte más occidental de la costa africana, Franco y sus hombres emprendieron una marcha de un centenar de kilómetros hasta la ciudad de Tetuán. De allí, se trasladó hasta Ceuta en tren para sumar fuerzas con el comandante Fontanés. Pocos días después, el ejército español celebraba la victoria en Melilla.

Desde entonces, la Legión celebra carreras para conmemorar aquella marcha. La de Málaga está considerada por los militares españoles como una locura y una de las más fuertes del mundo. Hoy día, civiles y soldados compiten para completar la distancia en tres categorías: ciclismo de montaña, corredores individuales y equipos de trail.

Abascal la hizo en 21 horas, 27 minutos y 20 segundos, junto con unos amigos. El ganador de aquel día fue el catalán Joan Marc Falcó, con un tiempo de 8 horas y 51 minutos. Entre las mujeres se impuso Ana Cerván, que completó el recorrido en poco más de 11 horas y 26 minutos a través de las localidades de Ronda, Arriate, Alcalá del Valle, Setenil de las Bodegas, Montejaque y Benaoján. Precisamente, Abascal fue criticado por decir que "la mujer no puede competir al mismo nivel que el hombre".

La disolución de los Mossos

Hoy mismo el partido de Abascal ha respondido al preacuerdo entre ERC y la CUP pidiendo la disolución de los Mossos dentro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, tanto en el Cuerpo Nacional de Policía como en la Guardia Civil, para ponerse "al servicio de todos los españoles" y garantizar así sus derechos y libertades.

Lo ha dicho el portavoz del partido de extrema derecha española, Jorge Buxadé, que ha considerado que el acuerdo alcanzado por los republicanos y los anticapitalistas en el marco de las negociaciones para la conformación del Govern de Catalunya y que persigue impedir el uso de las balas foam no sólo es una medida "absolutamente criticable", sino que además "roza lo delictivo". "Estaríamos ya en la omisión del deber de perseguir delitos", ha valorado.