En un partido de fútbol se conoce por amonestación cuando el árbitro detiene el juego, llama al jugador, levanta la tarjeta y anota el número de camiseta, nombre y apellidos del jugador. Se trata de una sanción administrativa que, aplicada en el momento oportuno, contribuye al buen desarrollo del juego y refuerza la autoridad del colegiado. El recurso de la llamada al orden comporta si cabe mayor solemnidad cuando, tras detener el juego, el mediador explica de modo claro y conciso que no tolerará nuevos despropósitos, bajo pena de una sanción efectiva.

En las primarias de un partido, es la autoridad electoral quien se encarga de garantizar el correcto desarrollo del procedimiento, el cumplimiento de la normativa, la transparencia y el respeto al principio de igualdad.

En el PSOE aún no se han convocado primarias, pero ya hay tres aspirantes y alguien que se ha erigido en árbitro y autoridad electoral de un proceso que formalmente no ha empezado. Se llama Mario Jiménez, es el portavoz de la gestora, y ya ha sacado la primera amonestación a uno de los equipos. Jiménez, que además es portavoz de Susana Díaz en el Parlamento andaluz, ha telefoneado al coordinador de la campaña de Pedro Sánchez, Alfonso Gómez de Celis, para llamar la atención sobre una cuña publicitaria difundida por un medio de comunicación gallego anunciando un mitin del ex secretario general del PSOE en Ourense.

Vayan sacando entradas para las primarias del PSOE porque será puro espectáculo

Al no existir aún reglamento ni fecha para el partido no hay autoridad que valga ni árbitro que pueda amonestar a los aspirantes, mucho menos a las plataformas de apoyo de cada uno que han proliferado como las setas por los territorios y que pueden utilizar sus propios recursos como les venga en gana. Es más, cuando la gestora del PSOE puso fecha al congreso -que no a las primarias- en el último comité federal, sabía perfectamente lo que hacía y lo que buscaba. Y era, además de dilatar los tiempos en beneficio de una de las aspirantes, controlar el censo de afiliados hasta el día de la convocatoria. De haberse convocado el cónclave y la consulta entonces, el “padrón” socialista estaría hoy cerrado y sin posibilidad de ser alterado.

He aquí una de las batallas a librar en las próximas semanas. València, Sevilla, Galicia, Albacete, Alacant…El goteo de quejas en las agrupaciones es constante. Altas que no se tramitan; nuevos afiliados a los que no se les gira el primer cargo bancario -en la consulta sólo podrán participar los que estén al corriente de pago de las cuotas-; decenas de registros con idéntica dirección…

El equipo de Sánchez ha dado la voz de alarma y ha solicitado ya al portavoz de la gestora una reunión urgente con las candidaturas de los tres aspirantes para fijar cuanto antes las reglas de un juego que promete más barro que limpieza y más negrura que visibilidad. La gestora se niega a hacer públicas las variaciones del censo que heredó el 1 de octubre cuando se erigió en “máxima autoridad”. Por algo será. Quizá sea porque además de árbitro en este partido también hace de equipo. Y eso que el partido aún no ha empezado. Vayan sacando entradas porque será puro espectáculo, y verán cómo quienes antaño apelaban a la participación y la transparencia como sinónimo de la mejor política enfocarán mañana de muy distinto modo. Todo, para que en un partido de estructuras endogámicas y clientelares no se escape ni un solo voto.