Marcos Rojo se ha convertido en el gran protagonista del Nigeria-Argentina por un gol sobre la bocina y Diego Armando Maradona ha sido el foco de atención en la grada por su comportamiento.

El exfutbolista, que ha celebrado el gol de Rojo con un censurable gesto desde el palco del estadio de San Petersburgo, ha encendido todas las alarmas por la manera con la que ha abandonado su localidad.

Maradona ha necesitado la ayuda del personal de seguridad para subir las escaleras que lo llevaban a su reservado. Las imágenes, otra vez, no dejan en una buena posición a la leyenda del fútbol argentino.

Un partido diferente y vivido de una manera totalmente fuera de control.

Los servicios médicos del estadio han tenido que hacerse cargo de Maradona en el mismo reservado después del silbato final.