El final de la invasión militar turca en el Kurdistán sirio parece más cerca después de que Rusia y Turquía acordaran este martes crear una zona de seguridad de 30 kilómetros de profundidad en el nordeste de Siria, de la cual serán retiradas las milicias kurdosirias con la ayuda del régimen de Bajar al-Ásad y Moscú en un plazo de 150 horas.

El acuerdo establece que, a partir de la medianoche de este miércoles, la policía militar rusa y guardias fronterizos sirios entrarán al lado sirio de la frontera turco-siria para facilitar la retirada de las Unidades de Protección Popular (YPG) y de su armamento a una distancia de 30 kilómetros en un plazo de 150 horas.

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Unidades del ejército sirio en el Kurdistán. | Foto: EFE

El presidente ruso, Vladímir Putin, ha asegurado después de firmar el acuerdo que este "es muy importante, crucial, y ayudará a resolver la muy tensa situación que se ha creado en la frontera turca". Su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, por su parte, ha afirmado que mediante este acuerdo "histórico", Rusia y Turquía empiezan "un nuevo periodo" en sus esfuerzos por conseguir una solución pacífica al conflicto sirio e impedirán que se cree "cualquier movimiento separatista" en territorio sirio.

Alto al fuego violado

Aunque el acuerdo entre Putin y Erdogan ya contemplaba un alto al fuego, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, ha salido este miércoles a sacar pecho por "haber acordado" con Turquía un "alto al fuego permanente" a Siria, y que como consecuencia ha ordenado "levantar todas las sanciones" que impuso este mes contra tres ministros del Ejecutivo de Erdogan.

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El presidente norteamericano, Donald Trump, comparece para anunciar el alto al fuego. | Foto: EFE

"Esta mañana, el gobierno de Turquía ha informado a mi Administración de que detendrán los combates y hacer permanente el alto el fuego. Este es un resultado creado por los Estados Unidos, y no por ninguna otra nación", ha dicho Trump en clara referencia a Rusia durante una declaración en la prensa desde la Casa Blanca.

A pesar del alto al fuego, hecho que las fuerzas kurdas han agradecido a Trump, las milicias han acusado este mismo jueves a las fuerzas turcas y sus aliados de seguir atacando el Kurdistán sirio. "A pesar de nuestro compromiso y la retirada de nuestras fuerzas de toda la zona del alto el fuego, el Estado turco y sus facciones terroristas siguen violando el proceso de la tregua y siguen la guerra de exterminio en contra de nuestra gente y pueblos", ha afirmado en un comunicado Kino Gabriel, un portavoz militar de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), alianza liderada por kurdos.

Según la fuente, desde esta mañana los rebeldes sirios apoyados por Ankara han lanzado "una ofensiva terrestre a gran escala en los pueblos de Manajer, Al Azariyeh y Mishrafa, fuera de la zona de alto el fuego". Estos pueblos se sitúan en el noroeste de la provincia de Al Hasaka y fuera del renombre "zona de seguridad" que Ankara busca establecer en el norte de Siria y que ya ha controlado, después de que las FSD se retiraran, en cumplimiento del pacto alcanzado entre los Estados Unidos y Turquía. Turquía por su parte también ha acusado a los kurdos de atacarlos y herir a cinco soldados turcos a la ya ciudad ocupada de Ras al-Ayn.

¿Dónde quedan los kurdos?

Por ahora, las milicias kurdas han abandonado ya la autollamada zona de seguridad creada por Rusia y Turquía al nordeste de Siria, según ha informado hoy un portavoz de la coalición liderada por los kurdos (FSD) en la agencia RIA Novosti. "Hemos abandonado el territorio que se encuentra entre Tal Abiad y Ras al-Ayn", ha dicho Mustafa Bali, portavoz de las FSD.

Por su parte, el comandante general de las FSD, Mazloum Abdi, ha denunciado en una rueda de prensa en Qamishli que el acuerdo establece la retirada de las milicias kurdas a 30 kilómetros de la frontera con Turquía en un periodo de 150 horas. "Las actuales conversaciones están sobre el destino de nuestro pueblo. El memorándum de entendimiento entre Rusia y Turquía no ha sido acordado por nosotros", ha lamentado.