En los últimos días, los viajes del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, han sido noticia. A pesar de que por su posición y su cargo lo más normal es que viaje por todo el mundo, el diario francés Le Monde, lo ha acusado de ser un despilfarrador y destinar demasiado dinero a sus desplazamientos. El medio detallaba que la partida de los gastos de viaje de Michel y de las delegaciones que lleva, que incluyen en miembros de su gabinete, personal de protocolo, servicios de seguridad..., estaría situado en torno a 1,9 millones de euros. Tres veces más que sus antecesores al frente del Consejo, que gastaban una media de 500.000 euros en viajes. En este sentido, el diario francés ha indicado en un artículo reciente que su voluntad es tener mucho más protagonismo a nivel internacional, motivo por lo que ha optado por multiplicar sus viajes. Además, los desplazamientos a menudo se hacen en aviones privados, hecho que no solo hace crecer el gasto, sino también el impacto medioambiental de sus movimientos.

Desplazamientos en aviones privados: caros y nocivos por medio ambiente

El contenido del artículo de Le Monde es muy duro con el presidente del Consejo Europeo, tanto, que incluso sus asesores han tenido que explicar los motivos de este incremento de los gastos por viaje. "En Bruselas se habla del gusto por los viajes de Charles Michel. Desde la pandemia de la covid-19, el presidente del Consejo Europeo se ha convertido en un auténtico trotamundos. De Nueva York a Pekín, de Phnom Penh a Johannesburgo, de Doha a Tokio, pasando por Berlín, París o Praga, recorre el planeta. A las instituciones, diplomáticos y funcionarios se sienten ofendidos por los "costosos" viajes del antiguo primer ministro belga. La prensa especializada en asuntos comunitarios, que Charles Michel y su entorno consultan con angustia cada mañana, se hace eco habitualmente de estas críticas", explica el medio francés, que destaca también el uso de aviones privados por parte del político, "muy caros y perjudiciales con respecto a la huella de carbono".

En este sentido, a través de sus portavoces, Michel ha desmentido en el diario francés la información sobre sus gastos excesivos por sus viajes de trabajo. Así, ha negado las acusaciones, contextualizándolas, ya que la suya ya de por si "intensa actividad internacional", todavía se ha incrementado más después de la guerra de Ucrania, cuando sus desplazamientos se han multiplicado. Así, el equipo del presidente del Consejo Europeo ha reivindicado su protagonismo en el escenario diplomático, "porque también está llamado a representar en la Unión Europea en el exterior, como prevé el Tratado de Lisboa". Un papel que consideran especialmente relevante en la "situación internacional que estamos viviendo, marcada por la guerra de Ucrania," según han puntualizado, en este caso, en el diario belga Le Soir.

El presupuesto en viajes se dispara un 27,5% más

Las explicaciones no acaban de convencer el medio francés, que recoge la información del diario Politico, según la cual para el 2024, el presupuesto de Michel, en proceso de aprobación, asciende a 2,6 millones de euros, un 27,5 más que en el 2023. Este aumento se explica "principalmente", indica la Secretaría General del Consejo en una nota del 1 de marzo, por la "intensa actividad internacional" de Charles Michel "después de la guerra de Ucrania". "Tenemos que explicar a terceros países nuestras sanciones contra Moscú y luchar contra la narrativa de Putin que asegura que somos los responsables de la inflación", detallan. Durante una reunión dedicada al tema el 9 de marzo, nueve países, entre ellos Alemania, Italia y Polonia, pidieron, no obstante, "aclaraciones" sobre este aumento, mientras Austria y Eslovaquia hacían referencia a los "problemas de imagen" que puede provocar este estilo de vida en un contexto económico complicado por la mayoría de la población de la UE.