Elon Musk tiene un sueño, ser el primero en llevar al hombre a Marte, y el Starship es el cohete que lo tiene que hacer posible. El magnate Sur-africano construyó con su empresa aeroespacial SpaceX el cohete mayor (123 metros) y potente nunca visto en la historia de la humanidad, pensado para reducir drásticamente los costes de lanzamiento gracias a su reutilización toda, y así aumentar la frecuencia de los vuelos espaciales, transportar grandes cargas y personas en la órbita terrestre, la Luna y Marte. A las 18.37 horas de Texas, y con siete minutos de retraso, el Starship se elevó en su noveno vuelo de prueba, después de que los dos anteriores acabaran en un fiasco. Y aunque esta vez llegó más lejos que sus dos predecesores, y la compañía asegura que se consiguieron avances significativos, la prueba volvió a acabar mal y se sufrieron problemas críticos que impidieron cumplir con los principales objetivos de la misión: el cohete acabó desintegrado media hora después de su despegue.
Despegue y separación de etapas exitosa
Desde la sala de control, Elon Musk seguía con euforia contenida el despegue de su cohete más emblemático, que emprendió el vuelo desde Starbase, su propia ciudad en el extremo sur de Texas. El despegue se produjo sin incidentes y consiguió la separación de etapas con éxito. Hay que recordar que el Starship está formado por dos etapas principales. El Super Heavy (primera etapa) es el propulsor, que utiliza 33 motores Raptor para proporcionar la mayor parte del impulso para el despegue, lo que permite llevar la nave Starship hasta el espacio. Esta nave es la segunda etapa, equipada con seis motores Raptor, tres de ellos optimizados para el vacío. La nave está diseñada para llevar carga (hasta 150 toneladas a órbita terrestre baja), satélites y eventualmente pasajeros. El Super Heavy impulsa la Starship fuera de la atmósfera terrestre, hasta una altitud y velocidad específica, y después vuelve para ser reutilizado, mientras la Starship completa la misión hasta la órbita o el destino fijado, y también vuelve para aterrizar o amerizar, facilitando así la reutilización total de los dos componentes.
🚨 BREAKING: Elon Musk watching the Starship 9 test flight from the control center. pic.twitter.com/eldff8EdMX
— DogeDesigner (@cb_doge) May 27, 2025
Primer Super Heavy reutilizado
En este noveno vuelo, se ha utilizado por primera vez un propulsor Super Heavy (el Booster 14), que ya había sido utilizado en la séptima prueba. Aunque fueron restaurados entre misiones, 29 de sus 33 motores Raptores eran de segunda mano. Después de la separación de etapas, el Super Heavy intentó por primera vez una maniobra de descenso en una dirección controlada para ahorrar combustible. El Booster 14 inició una secuencia de retorno más agresiva del normal, con un ángulo de ataque más elevado. Al cabo de seis minutos y medio del despegue, cuando el propulsor tenía que encender sus motores, explotó en el aire.
Starship's ninth flight test marked a major milestone for reuse with the first flight-proven Super Heavy booster launching from Starbase, and once more returned Starship to space → https://t.co/Gufroc2kUz pic.twitter.com/RNJkj5OobP
— SpaceX (@SpaceX) May 28, 2025
Mientras tanto, la etapa superior del cohete, la nave Starship 35, continuó su viaje, consiguiendo por primera vez en tres intentos una trayectoria suborbital que la llevaría del océano Atlántico hasta el océano Índico. Pero uno de los objetivos del vuelo era el despliegue de ocho maquetas de satélites Strarlink de nueva generación, lo cual hubiera supuesto que el Starship liberaba una carga útil por primera vez. Programada para unos 18 minutos después del despliegue, la prueba no se ha podido llevar a cabo porque la compuerta de la bahía de carga no se ha acabado de abrir. Space X también tuvo que cancelar otro de los experimentos importantes de esta misión, el reencendido de uno de los motores Raptor en pleno vuelo espacial, y tampoco pudo probar las mejoras y pruebas relacionadas con el escudo térmico y los nuevos alerones de la nave.
The fact that Starlink is still working and sending us this insane live footage of Starship barreling down from space is incredible. pic.twitter.com/CIPw3Lvru1
— Sawyer Merritt (@SawyerMerritt) May 28, 2025
Unos 30 minutos después del lanzamiento, se ha perdido el control del Starship. La nave ha empezado a girar de manera descontrolada después de que SpaceX detectara una fuga en algunos de los sistemas del tanque de combustible, y finalmente ha perdido el contacto durante la reentrada y se ha acabado desintegrando al entrar en la atmósfera sobre el océano Índico. Así, la tercera Starship de segunda generación ha acabado como sus dos predecesoras. Un "desmontaje rápido e imprevisto", es el eufemismo que ha utilizado Space X para explicar la explosión. La empresa de Elon Musk, lógicamente, SpaceX ha querido minimizar los resultados de la prueba, resaltando la parte positiva. "Como si la prueba de vuelo no fuera lo bastante emocionante, Starship experimentó un desmontaje rápido e imprevisto. Los equipos seguirán revisando los datos y trabajando para nuestra próxima prueba de vuelo. Con una prueba como esta, el éxito se basa en lo que aprendemos, y la prueba de hoy nos ayudará a mejorar la fiabilidad de Starship mientras SpaceX busca hacer que la vida sea multiplanetaria".
As if the flight test was not exciting enough, Starship experienced a rapid unscheduled disassembly. Teams will continue to review data and work toward our next flight test.
— SpaceX (@SpaceX) May 28, 2025
With a test like this, success comes from what we learn, and today's test will help us improve Starship's…