El gobierno de Israel, que preside Benjamin Netanyahu, ha anunciado que retirará las licencias de 37 ONG que operan tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania, y entre ellas se encuentra la organización Médicos sin Fronteras (MSF), así como Oxfam o ActionAid. El ejecutivo israelí considera que trabajadores de estas organizaciones "estuvieron involucrados en actividades terroristas", según ha confirmado el ministro de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo. El ministerio sostiene que las organizaciones no han entregado a las autoridades de Israel la "información completa y verificable sobre sus trabajadores", y acusa a MSF, sin presentar pruebas, de que "personas afiliadas" a la ONG estaban vinculadas a organizaciones islamistas palestinas "como la Yihad Islámica y Hamás".
Los ataques de Israel contra Médicos Sin Fronteras, así como organizaciones humanitarias que trabajan en la Franja de Gaza no son nuevos, y ya este mes de marzo, cuando aún duraba la guerra en Gaza, el gobierno de Benjamin Netanyahu decidió introducir nuevos requisitos para otorgar licencias para operar a las ONG internacionales que trabajan en los territorios palestinos ocupados. El ejecutivo israelí también ha asegurado en numerosas ocasiones que miembros de estas ONG colaboran o forman parte activa de las milicias armadas palestinas, una acusación con la que también ha atacado a organizaciones de las Naciones Unidas como la UNRWA, entre otras.
Cese completo de actividad antes del 1 de marzo
El ministerio de la Diáspora asegura que las ONG afectadas han sido notificadas de que sus licencias serán revocadas a partir del 1 de enero de 2026 y que deberán completar el cese de sus actividades antes del 1 de marzo del año entrante. En este sentido, MSF ha confirmado que, en fecha de este martes, no ha recibido ninguna comunicación al respecto y ha enfatizado que, si se le impide trabajar en la Franja de Gaza, esto tendría consecuencias "devastadoras" para los palestinos. La organización humanitaria se encarga de cerca del 20% de las camas de hospital en el territorio y colabora en un tercio de los partos que se producen. MSF asegura que se toma "muy en serio" las acusaciones de que miembros de su personal estén vinculados a grupos armados, y ha reiterado que "nunca" contrataría a ninguna persona si supiera que participa en actividades militares.
No cumplen los nuevos requisitos
El gobierno israelí argumenta que las organizaciones suspendidas no cumplen con los requisitos del nuevo y controvertido registro que ha impuesto este año. Además de detallar los nombres de todos sus trabajadores, Israel estipulaba como motivos para denegar el permiso negar la existencia de Israel como Estado judío y democrático, promover campañas de deslegitimación contra Israel, instar al boicot o apoyar el procesamiento de las fuerzas de seguridad israelíes en los tribunales extranjeros o internacionales. "El mensaje es claro: la asistencia humanitaria es bienvenida; la explotación de los marcos humanitarios con fines terroristas es inaceptable. Israel seguirá protegiendo su soberanía, a sus ciudadanos y la integridad de la acción humanitaria", señala el ministerio.