El presidente chino, Xi Jinping, ha abroncado este miércoles en público al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, durante la celebración del G-20 en Indonesia, acusándolo de filtrar una conversación que habían mantenido los dos dirigentes. Las cámaras han podido captar la imagen en una de las salas donde se celebra la cumbre internacional, pero eso no ha hecho dudar al mandatario chino de expresar sus reproches, siempre dentro de los límites diplomáticos.
"Todo lo que hablamos se ha filtrado, y eso no está bien. Y no es así como fue la conversación. Si hay sinceridad, podemos hablar con respeto mutuo, en caso contrario es difícil de decir", ha advertido Xi Jinping. Trudeau lo ha escuchado con cara de circunstancias y asintiendo de vez en cuando. Al final Trudeau se ha defendido diciendo que China es un gran actor de la economía global y que Canadá tiene que poder participar.
Intimate insight of Xi lecturing Trudeau at G20. Xi said it was not ok, to leak their previous discussion points to newspapers.
— Marcel Münch (@_mm85) November 16, 2022
"That's not the way the conversation was conducted" pic.twitter.com/AxOJF9RtxE
Trudeau y Xi Jinping conversaron ayer martes en un encuentro improvisado parecido al de hoy, y se mostraron en desacuerdo sobre el comercio y sobre la detención de dos canadienses en China. El presidente canadiense también expresó a Xi Jinping su preocupación por algunas informaciones que aseguran que China financió de forma encubierta a 11 candidatos a las elecciones generales del 2019 en su país. Según los medios del Canadá, el gabinete de Trudeau es quien explicó a los periodistas el contenido de la conversación con el dirigente chino.
Este fue el momento del encuentro del martes, en una imagen difundida por la oficina del primer ministro canadiense:

Trudeau y Xi Jinping en la cumbre del G-20 Oficina gobierno Canadá
Mientras tanto, en la misma cumbre del G-20 el presidente español, Pedro Sánchez, ha tildado este miércoles la declaración de independencia que aprobó el Parlament en el 2017, de "problemón". Sánchez ha hecho las declaraciones en una rueda de prensa en la cumbre, donde ha pasado por alto que el PSOE diera apoyo a la intervención de Catalunya con el artículo 155 de la Constitución y ha atribuido la gestión de los hechos únicamente al PP. "Yo en el 2018 heredé un problemón en Catalunya. Y cuando digo problemón quiero decir un problema de convivencia como muy pocos se han dado en los años de democracia, con un Parlament de Catalunya que declaró unilateralmente la independencia. Y creo recordar, si la memoria no me falla, que era el Partido Popular al que le hicieron esta declaración unilateral de independencia," ha indicado.
Sánchez ha subrayado que los delitos que a su entender supone declarar la independencia seguirán tipificados en el Código Penal, a pesar de la reforma de la ley de sedición, y ha apuntado que por eso no entiende el rechazo del PP. "Estos delitos no se despenalizan, ni salen delitos del Código Penal", ha insistido. El presidente español ha rehusado en cambio este miércoles pronunciarse sobre si estaría dispuesto a reformar el delito de malversación, como pide ERC, y ha pedido esperar conocer las enmiendas a la proposición de ley de reforma del Código Penal sobre esta cuestión, porque no se puede hablar "en abstracto sobre hipótesis".