Hay locales que se sabe que van a triunfar solo al ver su cuidada decoración, el dónde están ubicados o la inversión que han hecho en publicidad. Otros, los que de verdad merece la pena conocer, se sitúan en las mejores posiciones de las listas de favoritos gracias a su carta, a su buen hacer o a su originalidad. Esto pasa de boca en boca y cuando esta información te llega es algo parecido a un regalo de Navidad.
Y uno de los últimos protagonistas de estas recomendaciones puede confundir debido a su nombre y tal vez tienes la clave para entrar a un lugar diferente, exclusivo y muy cool y ni siquiera lo sabes.
Los speakeasy ya son una tendencia mundial por lo que hay que ir buscando cuál es tu preferido. Si todavía no sabes de qué estoy hablando, aquí va la lista de todo lo que debes conocer para seguir la nueva tendencia.
¿Qué es? Tenemos que remontarnos a la época de Gran Gatsby o de Al Capone para conocer el origen de estos bares. En los años 20, en Estados Unidos se prohibió la venta de alcohol debido a la Ley Seca. Al poco tiempo surgieron bares clandestinos en los que sí se vendía alcohol. La discreción era su máxima y por eso los clientes pedían sus bebidas bajito, para que nadie se enterase. De ahí el nombre, Speakeasy.
Un siglo después, aquellos bares clandestinos, en lugares escondidos, a los que se podía acceder con contraseña y en los que podías ser arrestado por tomarte una copa, vuelven a estar de moda, aunque con algunas variaciones. La principal y más importante es que ya no son ilegales.
¿Dónde están? Aunque en ocasiones no sea fácil verlos, están en todas partes. Y cada vez más. Aunque parte de la esencia de lo que fueron se ha perdido, sí siguen manteniendo un halo de misterio. Los hay de cara al público aunque también los que siguen utilizando una “tapadera” y el negocio principal está escondido tras una fachada que poco nos dice de la existencia de un bar. Un buen ejemplo es Bobby's Free (Carrer de Pau Claris, 85), cuya fachada es la de una antigua barbería. O el Speakeasy (no se han pensado mucho el nombre) que se asemeja a un antiguo almacén (C/ d'Aribau, 162)
¿Quién puede ir? Pues todo el que quiera disfrutar de un buen combinado en un ambiente diferente y busque un plan original. Ya no hay que conocer una contraseña o tener contactos que siempre llevan gabardina para entrar. O sí, los hay que piden contraseña, pero la publican cada día en redes sociales como parte del juego.
Aquellos bares clandestinos, en lugares escondidos, a los que se podía acceder con contraseña y en los que podías ser arrestado por tomarte una copa, vuelven a estar de moda
¿Qué ofrecen? Si les quitamos el encanto de lo escondido y el morbo de lo ilegal. Entonces ¿qué aportan nuevo? Que (por lo general) están especializados en cócteles de lujo, exclusivos, diferentes y elaborados por los mejores en su campo. No podemos olvidar que gracias a que el alcohol que se ofrecía en aquellos bares clandestinos era de contrabando y, por lo tanto, de una calidad pésima, se comenzó a mezclar para contrarrestar ese fuerte sabor, dando lugar a la coctelería de hoy, los nuevos bartenders rinden con sus creaciones un homenaje a aquellos pioneros.
También destacan por su cuidada decoración. Algunos de ellos bien podrían ser el escenario de una película de su época.
¿Por qué no puedo perdérmelo? Por qué son el nuevo lugar en el que ver y dejarse ver (con discreción claro.) Además, suelen trabajar mucho el ambiente y eso ya logra que tu noche sea mucho más especial. Y, sobre todo, porque así podrás meter baza en la próxima conversación sobre los lugares más de moda la ciudad.