Seguimos una semana más en la ciudad de Montblanc, capital de la comarca de la Conca de Barberà. Un territorio con un gran abanico de propuestas culturales, gastronómicas y tradicionales que lo convierten en visita obligatoria. Montblanc es una pequeña villa medieval situada en el valle del río Francolí y a los pies de las montañas de Prades que esconde verdaderos tesoros gastronómicos. Hoy les pondremos nombre y apellidos y conoceremos qué platos estrella se esconden tras los fogones de sus cocinas. ¿Preparados y preparadas para pasear por Montblanc y paladear las diferentes propuestas que La Foodlovers nos trae? ¡Pues empecemos gourmeters!

 

1. El Molí del Mallol, esencia medieval

Situado en un edificio del siglo XIII donde la piedra es la principal protagonista, este restaurante de las afueras de la ciudad de Montblanc ofrece una cocina de calidad en un ambiente de lo más acogedor. A través de sus propuestas gastronómicas te traslada a la esencia medieval que tanta identidad da al municipio. Parte de esta naturaleza la transmite su equipo de profesionales, que dan vida a este restaurante desde hace casi 30 años. La cocina lleva el espíritu del recetario tradicional catalán, con toques de autor y vanguardia. Su especialidad son los caracoles; en su carta encontraréis siete variedades diferentes, todas buenísimas. Somos testigos de ello, ya que tuvimos la suerte de probar el rollito de manitas de cerdo con calçots, butifarra negra y caracoles. ¡Muy recomendable! Adaptan su cocina a los productos de temporada, siempre dándole un toque creativo para sorprender al comensal. Trabajar con el producto de proximidad y de mayor calidad es su filosofía. Dispone de una extensa carta de vinos y cavas de diferentes Denominaciones de Origen. En una apuesta por el territorio, guardan en su interior como si de un tesoro se tratara, una gran variedad de vinos de la D.O. Conca de Barberà, haciendo especial mención a los vinos elaborados con la variedad autóctona de la zona: El Trepat.

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Rollito de manitas de cerdo con calçots, butifarra negra y caracoles / Foto: Marc Ortín

📍 Muralla de Santa Anna, 2

2. La Fonda de los Ángeles, la cocina de la abuela

Restaurante familiar en el centro histórico de Montblanc, en el interior de la muralla medieval. El espacio está situado en un edificio del siglo XIV y es gestionado por una familia que lo adquirió el año 1930. Desde entonces, es un negocio completamente familiar donde trabajan las hijas de la primera generación: María Teresa, Margarita y Montserrat. Tres hermanas que cada día trasladan las recetas de la abuela a los fogones del restaurante para ofrecer la esencia de la cocina tradicional catalana a todos aquellos que decidan adentrarse en La Fonda dels Àngels. Los platos son sencillos y los ingredientes de cosecha propia, cómo pudimos ver con el plato que nos sirvieron: albóndigas con berenjenas. Es por esto que muchos clientes dicen que comer en este restaurante es como volver a casa de la abuela. ¡Si estáis pensando en descubrir su propuesta gastronómica, reservad con tiempo suficiente, porque tienen lista de espera cada día!

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Albóndigas con berenjenas / Foto: Marc Ortín

📍 Plaça dels Àngels, 1

3. Cúmul, gastronomía experimental

Cúmul se encuentra en una de las plazas más bonitas de Montblanc: la Plaza Mayor. Como su nombre índica, este restaurante nace de un 'cúmulo' de ideas, circunstancias y sentimientos que dieron vida a este restaurante de pequeño formato. Entienden el mundo de la hostelería como una oportunidad de ofrecer propuestas próximas, informales y desenfadadas. Velan por la temporalidad de los productos y su proximidad. Si estáis buscando un espacio en el corazón de la ciudad donde sorprenderos, Cúmul está hecho para vosotros. Abren las puertas del restaurante cada día con la intención de recibir a un público con inquietudes y ganas de experimentar a través de la gastronomía. El producto está muy trabajado y el trato es excelente. Si vais tenéis que probar la crema de setas con níscalos de la comarca y calamares. ¡Para lamerse los dedos!

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Crema de setas con níscalos de la comarca y calamares / Foto: Marc Ortín

📍 Carrer del Ducat, 1

Estos tres restaurantes que La Foodlovers ha descubierto os esperan en la ciudad de Montblanc con las puertas abiertas, deseando cocinaros sus grandes creaciones gastronómicas que os prepararán entre los fogones de las cocinas de sus restaurantes con todo el amor y respeto del mundo. Si queréis conocer otros restaurantes del territorio, en la sección Kilómetro 0 de La Gourmeteria de ElNacional.cat, encontraréis una selección de lo más diversa e interesante: Girona, Ripoll, Solsona... ¡No os dejéis ninguno sin probar!