Agentes de la Guardia Urbana de Badalona y efectivos antidisturbios han actuado este viernes contra el campamento instalado por parte de los desalojados el día anterior que ocupaban el antiguo instituto B9. El hecho de que los expulsados de este edificio, la mayoría inmigrantes que malvivían en él en pésimas condiciones, no tengan alternativa de residencia, ha desatado un cruce de reproches entre el alcalde de Badalona, el popular Xavier García Albiol, el gobierno de la Generalitat y el gobierno español. Albiol sostiene que estas personas deben ser atendidas por los gobiernos de Pedro Sánchez y Salvador Illa. Carlos Prieto, delegado del gobierno español en Catalunya, ha acusado a Albiol de "dejación de funciones". Dos relatores de la ONU se han sumado a las críticas y han denunciado la "retórica" del alcalde badalonés.
