Este domingo 28 de mayo se celebran las elecciones municipales en todo el estado español. Normalmente, la rutina para ir a votar es bien sencilla, acercarse al colegio electoral correspondiente, coger la papeleta que corresponde a nuestro candidato preferido y, dentro de un sobre, depositarlo dentro de la urna. Pero eso no es exactamente así para las personas invidentes. Para poder votar con total privacidad a este colectivo necesita un kit especial, adaptado al código braille, que les permita llevar a cabo este proceso con total autonomía y privacidad, y manteniendo el secreto del voto. Este domingo, solo tres municipios de todo Catalunya dispondrán de estos kits. Cerdanyola del Vallès, Ripollet y Terrassa. Es una iniciativa que asumen sin ninguna ayuda ni ningún decreto que obligue a hacerlo y que será costeada por los mismos ayuntamientos.

A falta de este equipamiento, como pasará en la gran mayoría de municipios este domingo, los invidentes tienen que votar acompañados de una persona de confianza que sea quien coja la papeleta y la deposite, pero este procedimiento constituye una vulneración del derecho a la privacidad y comporta que tenga que haber confianza ciega en que esta persona coja la papeleta que se le indica. Con respecto a las elecciones autonómicas, generales y europeas, el acceso a los kits en braille sí que es un derecho que está garantizado en todos los municipios, gracias a una reforma de la ley electoral de 2007.

Para cambiar esta situación, la Asociación Catalana para la Integración del Ciego (ACIC) reclama medidas y voluntad política para hacer frente a la problemática. "Nosotros tenemos derecho a votar con total privacidad y autonomía en todas las elecciones, como lo hace cualquier otra persona, pero por desgracia no se puede hacer. Solo tres ayuntamientos lo facilitan", explica José Ángel Carrey, presidente de ACIC y vecino de Cerdanyola del Vallès, municipio que sí que dispondrá de los kits de voto en braille. José Àngel es también el impulsor de esta reivindicación. "En 2004 yo vivía solo en Rubí y tenía que ir a votar, pero no tenía ninguna persona de confianza que me acompañara y me di cuenta de que eso constituía una vulneración de mis derechos, fue entonces cuando empecé esta reivindicación", afirma.

Reforma de la ley electoral en el 2007

El año 2007 se aprobó una reforma de la ley electoral y se añade un apartado donde se afirma que se garantiza que la administración establecerá un procedimiento que garantice a las personas ciegas el secreto del voto. En este sentido, en las elecciones autonómicas, generales y europeas se ofrece el kit para votar en braille, pero no es el caso de las municipales. Según explica el presidente de ACIC, desde el gobierno central argumentan que "es demasiado complicado de organizar", porque debería hacerlo cada municipio por separado. "La ausencia de una regulación específica en este sentido hace que en las municipales no se garantice nuestro derecho a votar con privacidad y el secreto de voto. Hace falta voluntad política y ya hace muchos años que reivindicamos nuestros derechos. Es injusto que tengamos que ir a votar acompañados, sin autonomía y sin privacidad, porque falta la voluntad política y las ganas de acabar con esta problemática. Agradecemos a los ayuntamientos que por iniciativa propia nos aportan soluciones, pero tiene que ser generalizado", afirma José Ángel.

Los ayuntamientos cogen la iniciativa, pero sin apoyo

En las últimas elecciones municipales, en 2019, se produjo un avance importante para cambiar la situación de exclusión que viven las personas con discapacidad visual a la hora de votar. El Ayuntamiento de Cubelles tomó la decisión pionera de poner en marcha, por iniciativa propia, el sistema de voto accesible para las elecciones municipales, a pesar de la ausencia de un decreto que lo regule. Cubelles se convirtió en el primer municipio comprometido con esta causa, abriendo un camino que otras localidades han decidido seguir. Cerdanyola del Vallès, Ripollet y Palau-solità y Plegamans, siguiendo el ejemplo de Cubelles, aprobaron y pusieron a disposición el mismo año kits de voto accesible para los comicios locales de estas poblaciones el año 2019.

Este año, Terrassa se ha sumado a esta iniciativa, y Cerdanyola y Ripollet repetirán, un total de tres municipios que ofrecerán esta opción. Así, los usuarios interesados pueden dirigirse a estos ayuntamientos para solicitar los kits de voto accesible para su colegio electoral, lo tendrán que hacer llamando al ayuntamiento de su municipio y haciendo la solicitud para que se les hagan llegar los kits en braille. Hay que señalar que el Ayuntamiento de Barcelona aprobó en el pasado una declaración institucional en que se comprometía a garantizar el sistema de voto accesible para las personas invidentes en las elecciones locales del 2019. No obstante, ni en aquel momento ni en las próximas elecciones municipales de este domingo 28 de mayo se implementará esta medida, ni en Barcelona ni en ninguna otra ciudad capital de provincia del estado, excepto las poblaciones ya mencionadas.