Ha llegado el momento que muchos esperaban en Ducati, de hecho, 7 años, desde 2016, cuando Ducati quiso hacer realidad el fichaje de Marc Márquez para salir del pozo en el que se encontraban sumidos los de Borgo Panigale. No obstante, aquel sueño se vio frustrado ante las altas expectativas del ilerdense, que no quiso rebajar su caché, inaccesible para los italianos, ni abandonar Honda. Y es que en aquel momento, la marca del ala dorada era una de las más potentes de la parrilla, y permitió al '93' conquistar varios mundiales.

Ahora, la situación ha dado un giro de 180 grados y la intervención de Gigi Dall'Igna, artífice de la Desmosedici, ha permitido alzar de nuevo a la escudería italiana con una doble corona en el mundial de MotoGP con Pecco Bagnaia como principal protagonista. Toda esta situación ha generado que el catalán, con una Honda venida a menos e incapaz de entregarle una moto competitiva, rápida y segura, haya decidido dejar de lado a la familia japonesa, para unirse a la factoría Ducati.

Bagnaia y Marc Márquez, en la previa de un Gran Premio de MotoGP / Foto: Europa Press
Bagnaia y Marc Márquez, en la previa de un Gran Premio de MotoGP / Foto: Europa Press

En Ducati no quieren a Marc Márquez

Lo hará de la mano del equipo de Nadia Padovani, el Gresini, que lo juntará con su hermano Álex Márquez. Un movimiento que ha generado mucho revuelo entre los de Borgo Panigale que, conscientes del carácter competitivo, ganador, y complicado, del '93' querían evitar a toda costa problemas internos con sus pilotos. Al menos ese era el argumento.

Sin embargo, el discurso ha ido variando conforme Marc se acercaba a Gresini y los dirigentes ducatistas han ido aceptando la obviedad, Márquez es el mejor, y así lo afirmaron. Tanto es así que, de hecho, Paolo Ciabatti le abrió las puertas del equipo oficial en 2025, incluyéndolo entre los candidatos para compartir box con Bagnaia.

Presentació Gran Premi Moto GP Montmeló Marc alex Márquez / Foto: Carlos Baglietto
Alex y Marc Márquez en la presentación del GP de Barcelona / Foto: Carlos Baglietto

Los mandamases italianos se han rendido a los pies del ilerdense y se deshacen en elogios hacia él. Además, algunos como el propio Gigi Dall'Igna muestran su orgullo porque "el mejor piloto de la parrilla" se suba a una Ducati. Pero, no todos en Italia están tan contentos con este hecho.

Valentino Rossi influencia a la afición italiana

Valentino Rossi ni olvida ni perdona aquel rifirrafe con Marc Márquez, que acabó con una patada de il dottore sobre el '93', y que fue el inicio del fin para la relación entre ambos. Aquella situación, producida por un Márquez agresivo y un Rossi con muy mal perder, significó la conocida enemistad que a día de hoy mantienen.

Valentino Rossi / Foto: Europa Press - Gregory Lenormand
Valentino Rossi durante una rueda de prensa / Foto: Europa Press - Gregory Lenormand

El '46' es un auténtico ídolo en Italia y su influencia entre los tiffosi también ha derivado en un odio irracional hacia el ilerdense. El ejército de fieles de Valentino no dudó en abuchear el nombre de Marc Márquez cuando Guido Meda, presentador del acto, lo nombró en el acto de clausura de Ducati, Campioni in Festa. Ahora, el '93' tendrá que tratar de revertir la situación a base de grandes actuaciones, y ganarse el cariño de los italianos, aunque, es una ardua tarea.