La Real Sociedad vive una de las temporadas más complicadas de los últimos años. Con solo tres puntos por encima del descenso, el equipo no funciona desde que Imano Alguacil abandonó el banquillo. Sergio Francisco no da con la tecla ni logra consolidar los engranajes del equipo.
Una de las dudas más evidentes está en el lateral derecho. Álvaro Odriozola, que llegó con grandes expectativas, no ha logrado consolidarse como titular. Las lesiones y la irregularidad en el campo han generado un clima de tensión con el míster, que busca soluciones claras para su defensa.
Odriozola no logra reencontrarse con su mejor versión
Desde su regreso al club, Odriozola ha vivido momentos muy complicados. Las lesiones le han impedido mantener continuidad y, cuando ha estado disponible, sus actuaciones no han convencido. Francisco prefiere jugadores que den seguridad defensiva y consistencia, algo que Odriozola no ha logrado demostrar de forma regular. Esto ha dejado al lateral relegado a un papel secundario dentro del equipo.
En lo que va de temporada, Odriozola solo ha disputado 57 minutos en LaLiga, durante la derrota 2-1 ante el FC Barcelona, donde marcó el gol del descuento. En Copa del Rey, jugó 78 minutos frente al SD Negreira, otra oportunidad para demostrar su valía, que tampoco cambió su situación. Su rol actual se limita a participar en entrenamientos. Mantiene buena relación con el vestuario, pero su presencia en los partidos importantes es mínima.
Por su parte, Jon Aramburu, el internacional venezolano, ha ganado la confianza de Sergio Francisco. Su rendimiento constante y seguridad en defensa lo han colocado como titular indiscutible. Mientras Aramburu esté disponible, Odriozola deberá esperar en el banquillo. El entrenador ha dejado claro que la decisión no es personal, sino basada en el rendimiento y la fiabilidad.
Sergio Francisco no confía en Odriozola
El propio Odriozola ha hablado con franqueza sobre su situación. Tras la derrota ante el Barcelona, confesó que su regreso a la Real Sociedad ha sido un “infierno”, ya que las lesiones no le permitieron contribuir al club como deseaba. Con contrato hasta 2029, tiene tiempo para revertir la situación. Está totalmente comprometido con el club. Pero no parece que vaya a ser con Sergio Francisco.
El vestuario reconoce su esfuerzo y su actitud en los entrenamientos. Sin embargo, Francisco prioriza la disciplina táctica y la consistencia defensiva. Odriozola deberá mejorar físicamente y adaptarse a las exigencias del entrenador si quiere recuperar su lugar. La competencia es dura y la paciencia escasa.