El regreso al Spotify Camp Nou supuso el inicio de una nueva etapa en el Barça, pero también fue un homenaje al pasado representado a través de Juan Canela (95 años) y Jordi Penas (91 años), los dos autores del servicio de honor. Entre ilusiones renovadas y una grada que volvía a vivir fútbol después de más de dos años en el exilio, el club recordó que su fuerza no solo se encuentra en los títulos, sino en las personas que han mantenido viva la pasión blaugrana durante tantas décadas, propiciando un momento que unió el peso de la memoria con el futuro en una sola imagen.
Jordi Penas, un testigo del barcelonismo que atraviesa generaciones
Desde ElNacional.cat hemos tenido el privilegio de hablar con Jordi Penas, uno de los socios más veteranos del Barça, con un pasado, un presente y un futuro que respiran barcelonismo por todas partes. Porque la suya es una vida que gira alrededor del color blaugrana: socio desde muy pequeño, formó parte de la sección de baloncesto como jugador, desfilando también en la inauguración del Camp Nou del año 1957. "La primera vez fue para inaugurar un estadio para mi Barça; el sábado, fue todo más grande, pero lo más importante es que estaban todos mis hijos", relata Penas desde su casa.
Pasan los años, cambian los estadios, aumenta la familia, pero lo que siempre se mantiene es el amor por el Barça. "No recuerdo cuándo me hice socio. Era muy joven. Nos hicimos socios con mi padre. Ya hace muchos años de eso. En mi casa siempre ha habido el ambiente de ser del Barça. Ser socio del Barça considero que es casi una obligación. Significa seguir una línea bonita", defiende un Penas que explica también que el pasado sábado vivió uno de los momentos más emotivos como culé.
Un reconocimiento que queda para siempre
"Laporta había dado una invitación a un hijo mío. Una vez allí, me dieron una silla. Entonces conocí a quién debía acompañar al campo para hacer el servicio de honor. Así fue mi llegada, muy especial. Hablé con Laporta. Yo ya lo conocía un poco. El día antes, habían dado una medalla de socios a dos hijos míos y hablamos un poco. En el césped me dio las gracias, cosa que como socio ilusiona mucho. Me dio las gracias porque fui muy entusiasmado para hacer la colaboración con el club. Me hizo mucha ilusión", detalla.
Jordi Penas todavía sigue la actualidad del Barça día a día. Y augura un gran futuro para este equipo de Hansi Flick: "Estoy seguro de que irá bien porque muchos de los jugadores son nuestros: de la Masia, catalanes... Le dan la importancia que debemos dar a ser del Barça". Pero más allá de los resultados y de los títulos, para Penas lo más importante es mantener este latido blaugrana intacto. "Dentro de tres o cuatro meses será la primera vez que tendré un bisnieto. Y este sí que lo tendremos en Barcelona. Lo que haremos es que cuando nazca, el mismo día, iremos a hacerlo socio. Cuando nazca, que se llamará Sasha, queremos que ya sea socio del Barça". Una muestra clara de que la historia de este club no solo se escribe en el césped, sino que también se perpetúa de generación en generación, transmitiendo este amor incondicional que no se cambia por nada.
