Los catalanes citándose en las urnas y el Barça superando rondas de la Copa del Rey, dos acciones que suceden casi cada año y con las cuales hemos aprendido a convivir. Las dos resultan tan fatigosas, que, cuándo notamos que se acercan, nos prometemos a nosotros mismos que esta vez no volveremos a caer de cuatro patas. La realidad, sin embargo, es que al final, cuando el peso de la moralidad cae sobre nuestros hombros, no tenemos otro remedio que mover el culo y defender lo que es nuestro con poco orgullo pero más dignidad. Incluso sabiendo que el premio, en caso de que salgamos victoriosos, será despreciado por el enemigo y por nosotros mismos.
Este jueves el Barça recibe al Leganés en un partido correspondiente a los octavos de final de la Copa del Rey (19:00h / DAZN), la competición donde el club brilla temporada tras temporada. Después de alcanzar la final del torneo durante seis ediciones consecutivas, la Copa se ha convertido en un título más que secundario que no anima al aficionado culé. Así, el conjunto blaugrana asume con resignación que superar al equipo de Javier Aguirre -penúltimo a la Liga- es una obligación que sólo tendrá valor si se acaba alzando el trofeo en la final. Quique Setién, mientras tanto, utilizará la eliminatoria para ganar tiempo. Después de hacer el ridículo en Valencia, los futbolistas tendrán una nueva oportunidad por demostrar que sí que han entendido su pizarra.
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La hora de convencer
Granada, Ibiza y Valencia. El Barça de Setién dominó la posesión contra estos tres rivales pero, a la vez, transmitió sensaciones muy irregulares. Delante del Leganés, uno de los peores conjuntos de Primera, el objetivo será clasificarse para la siguiente ronda pero también conseguir convencer. El técnico cántabro hasta ahora había apostado por un sistema con tres defensas y dos carrileros, pero sus futbolistas todavía no han asimilado los automatismos de un dibujo -y un estilo- diametralmente opuesto al de Ernesto Valverde. Contra el Leganés, y aprovechando que habrá que hacer rotaciones pensando en la Liga, Setién podría presentar un esquema diferente al que ha utilizado hasta ahora.
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¿Descansará Messi?
Es una de las incógnitas del partido. Este domingo el Barça se ve las caras con el Levante, de manera que Setién ya anunció en rueda de prensa que haría alguna rotación. Sin Luis Suárez, lesionado, Carles Pérez, en Roma, y Ousmane Dembélé, en la fase final de su recuperación; el técnico sólo cuenta con tres piezas ofensivas, Leo Messi, Antoine Griezamnn y Ansu Fati. El '10' argentino puede solucionar el partido en cuestión de segundos, pero ponerlo en riesgo en un partido como el del Leganés parece peligroso.
En cualquier caso, si alguna de las piezas del tridente se queda en el banquillo, quien podría tener opciones de formar parte del once es el sabadellense Àlex Collado. El extremo del B, que ya debutó contra el Valencia, se ha ganado la confianza de Setién.
Convocados: Ter Stegen, Semedo, Piqué, Rakitic, Busquets, Arthur, Messi, Lenglet, Griezmann, Alba, Sergi Roberto, De Jong, Vidal, Umtiti, Junior, Peña, Collado, Fati.
Descartados: Neto, Suárez, Dembélé (lesió), Wagué (decisió tècnica).
El 11 de ElNacional
