El fútbol era un juego de caballeros y para caballeros en sus inicios a finales del siglo XIX, pero hoy día todavía tenemos algunos de aquellos deportistas con honor y que representan de la mejor de las maneras el deporte. El Manchester City eliminó al Real Madrid de la Champions League, pero cuando el duelo se acabó, ya con los futbolistas en los vestuarios, se pudo ver una imagen de mucho valor con Pep Guardiola y Zinédine Zidane como protagonistas.

El uno, sentado sobre la nevera de bebidas isotónicas, y el otro, de pie delante escuchando. Sí, Guardiola y Zidane, después de una lección de fútbol demostraron una lección de deportividad. A pesar del resultado, charla final sobre el partido y sobre la vida. El fútbol es un juego y, si hay uno que gana, el otro pierde.

Una imagen vale más que mil palabras y Guardiola y Zidane son dos ejemplos del fútbol por sus valores, por su deportividad y por su manera de hacer.

Respeto y mucha clase. Muchos tendrían que aprender de ellos.