El FC Barcelona respira un poco mejor. Pedri, una de las piezas más determinantes del equipo, encara la recta final de su recuperación y, si todo continúa como hasta ahora, estará más cerca del Chelsea que nunca en las últimas semanas. El joven crack podría entrar en la lista de convocados para el crucial duelo europeo en Londres.
La temporada pasada del canario fue una excepción en su carrera reciente. Disputó 59 partidos, casi todos, y solo se perdió uno por una gastroenteritis. Recuperó sensaciones, continuidad y confianza. Ese ritmo competitivo fue precisamente lo que Hansi Flick destacó en varias ocasiones: Pedri necesitaba jugar para no caer lesionado. Y el comienzo de este curso confirmó esa teoría con trece titularidades consecutivas que hablaban de una musculatura estable y una mentalidad fuerte.
Pedri apunta a Stamford Bridge
Pero en el Clásico del Santiago Bernabéu todo cambió. Pedri acabó el partido expulsado y, además, con una notable fatiga muscular que terminó convirtiéndose en una rotura del bíceps femoral distal de la pierna izquierda. El parte médico no especificaba tiempo de baja, pero la prudencia del club y los antecedentes del jugador exigían calma.
Desde entonces, Pedri ha encadenado tres partidos fuera del equipo. Sin embargo, su evolución está siendo tan positiva que los servicios médicos mantienen los plazos iniciales. No estará ante el Athletic en el regreso del Barça al Spotify Camp Nou, pero podría volver a entrenarse con el grupo en cuestión de días. Un paso fundamental para recibir el alta médica antes del viaje a Londres.
En el club no quieren repetir errores. La experiencia con Raphinha, acelerado para llegar al Clásico y lesionado de nuevo, ha dejado lecciones claras. No habrá riesgos. Si Pedri viaja, será porque está preparado, aunque su rol inicial sería desde el banquillo, sin presión y sin exponer su físico.
La enfermería del Barça se vacía
El calendario aprieta. El Barça necesita estar entre los ocho mejores de la Champions y el duelo ante el Chelsea puede ser determinante. Con un Pedri recuperado, aunque sea para media hora, Flick gana control, claridad y pausa en la medular. Y el equipo lo nota.
Si finalmente no se le fuerza para Londres, todo apunta a un regreso el día 29 ante el Alavés. Sería la fecha ideal para que recupere ritmo competitivo y llegue al 2 de diciembre, ante el Atlético de Madrid, en condiciones óptimas.
Además, la enfermería empieza a vaciarse. Raphinha, Joan García, Lamine Yamal y Marc Casadó apuntan a volver este fin de semana. Una buena noticia para un Barça que ha tenido que recomponerse jornada a jornada.