La Real Sociedad ha hecho valer la diferencia de presupuesto y calidad para ganar sin sufrir en su visita al Lleida Esportiu (0-1). El gol de Sergio Canales deja la eliminatoria prácticamente sentenciada y le resta trascendencia al partido de vuelta en Anoeta.

El gol trincha al Lleida

El Lleida llegaba al partido en el mejor momento de la temporada, sumando 10 puntos en los últimos cuatro partidos del grupo III de la Segunda División B. Una racha que lo ha llevado hasta la tercera posición, sólo por detrás del Villarreal B y el Mallorca. La buena dinámica, sin embargo, no ha sido suficiente contra una Real que ha hecho gala de su fondo de armario.

Gerard Albadalejo, entrenador del Lleida, afrontaba la visita de los vascos con el objetivo de salir con vida del Camp d'Esports. Líneas muy juntas, minimizando las pérdidas en defensa, regalando la pelota y saliendo al contragolpe. La Real Sociedad no rechazaba la posesión y no tenía prisa para madurar las jugadas.

A través de la paciencia, los jugadores de Eusebio Sacristán han empezado a inclinar el campo. Adnan Januzaj ha avisado con un disparo cruzado que ha salido rozando el palo de la portería de Oliveros. La ocasión de Januzaj ha sido el preludio del 0-1. Sergio Canales, un talento maltratado por las lesiones, se ha reivindicado con un disparo de 30 metros que ha entrado por la escuadra. El gol de la jornada en la Copa. Imparable.

El Lleida tenía casi 15 minutos para reaccionar antes del descanso, pero el tanto de Canales lo ha dejado inconsciente. Los locales parecían desactivados, como si su plan hubiera perdido todo el sentido. Por suerte, la Real no ha estado acertada en ataque y han podido mantener el 0-1.

Y la segunda parte lo reactiva

Revitalizados por el descanso o una arenga de Albadalejo, los jugadores del Lleida han vuelto al campo con otro aire. La Real Sociedad ha empezado a sufrir en defensa y tenía problemas para superar la presión con la pelota. Nierga no ha aprovechado un centro de Pumar y Valiente ha puesto a prueba al portero Toño con un disparo que ha acabado en córner.

Los poco más de 10.000 aficionados que ocupaban parte del Camp d'Esports empezaban a creer en las posibilidades de su equipo, que encontraba espacios donde antes había rivales. Mousa ha roto la defensa vasca con una jugada individual pero su pase al espacio no ha encontrado rematador. Poco a poco, el Lleida recuperaba las constantes vitales, minimizando las distancias con un equipo de Europa League.

Juanmi ha hecho devuelto el Lleida a la realidad en una jugada aislada de la Real, que Oliveros ha conseguido desviar cuando ya se cantaba el segundo gol. Con el paso de los minutos, las fuerzas se han vuelto a igualar y los de Eusebio aceptaban el guion del partido, sin pasar apuros, ante el poco empuje de los delanteros.

El partido ha muerto sin que ninguno de los dos equipos hiciera nada para evitarlo. El Lleida por incapacidad y la Real por conformismo, han acabado encajando sus manos después de los 90 minutos. El resultado convierte en un milagro para los de Albadalejo estar en el sorteo de los octavos de final.