Después de días en silencio, Messi se pronunciará hoy mediante un comunicado. En este, los abogados del argentino responderán a la Liga, que publicó otro comunicado donde se ponían del lado del Barça y negaban a Messi cualquier posibilidad de marcharse gratis del club, como así deseaba el futbolista.
El ente dirigido por Tebas, que se mostró contundente a la hora de afirmar que si el 10 del Barça quería marcharse tenía que hacerlo pagando la cláusula de rescisión de su contrato, de 700 millones de euros, sabrá la posición de Messi en las próximas horas, lo que añade todavía más lío a un tema que ya es más próximo al derecho laboral que al fútbol.
Javier Tebas, presidente de la LFP, no tiene intención de dejar marchar a Messi. / Europa Press.
Tebas no quiere dejar escapar a Messi
En el comunicado que hizo la Liga se decía que "el contrato se encuentra actualmente vigente y tiene una 'cláusula de rescisión' aplicable al supuesto de que Lionel Andrés Messi decida instar la extinción unilateral anticipada del mismo". Messi, por su parte, defendía que la cláusula liberatoria de su contrato, que lo dejaría marchar gratis al final de la temporada, seguía teniendo validez dada la excepcionalidad de esta campaña. El argentino, y su equipo de abogados, entendían que puesto que se habían alargado los contratos para poder acabar las competiciones, también lo había hecho así esta cláusula, que expiraba el 10 de junio.
El Barça y la Liga, en cambio, no estaban de acuerdo y afirman que una vez Messi no había comunicado su deseo de marcharse antes de esta fecha, el contrato queda renovado por una temporada más y la única opción que tenía Messi de marcharse era haciendo el pago de la cláusula de rescisión de 700 millones de euros a la Liga, los encargados de facilitar la baja federativa a los futbolistas.
La rivalidad Messi-Cristiano, una pérdida irreparable para la Liga. / EFE
Con esta postura, Tebas ejemplifica que no quiere, ni puede, dejar escapar a Messi, el activo más importante de la Liga Santander. El fútbol español, con la marcha de Cristiano Ronaldo a la Juventus, ya perdió una rivalidad histórica que había elevado la competición y los Clásicos a otra dimensión futbolística. Ahora, si Messi conseguia marcharse, la Liga se devaluaría muchísimo y, esto, en tiempo de coronavirus, aún sería una pérdida más grave.
El todavía capitán del Barça, que a estas alturas parece complicado que se pueda marchar, estaría meditando la posibilidad de quedarse un año más y agotar el contrato que lo une al club para poder marcharse gratis al final de la temporada que viene. Con la visita de su padre a Barcelona y la reunión que ha tenido con Bartomeu, parece que Jorge Messi habría convencido a su hijo de que la mejor decisión era seguir un año más y poder valorar durante la temporada el futuro de la carrera del de Rosario.