El Real Madrid vive un momento delicado. Un tramo de temporada lleno de dudas. De resultados pobres. De un liderazgo que se ha desmoronado en apenas tres jornadas. El golpe más reciente llegó ante el Girona, un equipo en zona de descenso. Otro empate. Otro tropiezo. Y la sensación de que el proyecto de Xabi Alonso pierde fuerza partido a partido. El Madrid, que parecía renacer tras el Clásico, ha vuelto a caer en una dinámica peligrosa. Un solo triunfo en cinco encuentros. Un fútbol sin claridad. Sin determinación. Un equipo que ha dejado escapar una ventaja que parecía sólida.
En este contexto turbulento, un nombre vuelve a crecer entre los despachos del Bernabéu: Jürgen Klopp. El técnico alemán ya estuvo en las quinielas meses atrás. Y, aunque el míster germano esté ganándose muy bien la vida realizando trabajos de despachos y su fichaje sea casi imposible, lo vuelve a estar ahora. No hay negociaciones formales. Pero sí mensajes. Condiciones. Exigencias que Klopp ya expresó antes del verano, cuando Florentino Pérez buscaba sustituto para Carlo Ancelotti. Entonces, los finalistas eran Klopp y Xabi Alonso. Y el alemán dejó claro qué necesitaba para aceptar el cargo.
Las peticiones de Klopp ya son conocidas en el Real Madrid
Klopp pidió dos fichajes. Y pidió cuatro salidas. Sin medias tintas. Sin concesiones. Su idea es simple: si él llega, manda él. Con control absoluto. Con autoridad deportiva total. El Madrid, para Klopp, necesita una reestructuración profunda. No solo un ajuste. Una transformación.
El entrenador alemán considera prioritario reforzar dos posiciones muy concretas. La primera, un mediocentro organizador de nivel top. Alguien capaz de liderar el juego, asumir el mando y dar equilibrio. La segunda, un delantero puro. Un ‘9’ de referencia. Un goleador que libere a Mbappé, que permitiría mover al francés hacia la banda, donde el alemán cree que puede brillar aún más. Klopp ve un potencial desaprovechado en la actual configuración del ataque. Y quiere corregirlo de inmediato.
Klopp querría el control total de la plantilla
Pero sus exigencias no se quedan ahí. Klopp también ha señalado a cuatro jugadores que, según su análisis, deberían salir del club: David Alaba, Dani Ceballos, Brahim Díaz y Endrick. Futbolistas que tampoco cuentan plenamente para Xabi Alonso, aunque el técnico vasco nunca llegó a reclamar sus salidas. El técnico alemán, en cambio, sí lo hizo. De forma directa. Él solo aceptaría un Madrid construido a su medida. Sin interferencias. Sin piezas que no encajen en su plan.
Y exige algo más: poder total en la toma de decisiones. No solo en fichajes. También en bajas. En la gestión diaria del grupo. En el modelo de entrenamiento. En la estructura de juego. Un control que Florentino Pérez nunca ha estado dispuesto a entregar por completo. Esa condición fue, en su día, la razón que inclinó la balanza hacia Xabi Alonso.
