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Después de que este martes en Madrid unos seguidores radicales del PSV Eindhoven fueran detenidos por desórdenes públicos como estropear vehículos y agredir a diferentes ciudadanos, esta noche se ha producido una situación similar en Barcelona. 

Mientras que en la capital española los aficionados holandeses se mofaban de unas indigentes rumanas, los gunners les tomaron el relevo en la plaza Reial de Barcelona y se burlaron de un sin techo con una discapacidad física que frecuenta las terrazas pidiendo limosna.

Entre cervezas, cánticos y gritos, y antes de que empezara el partido de Liga de Campeones Barça-Arsenal, los radicales ingleses se tiraron al suelo emulando a los trotamundos y pasaban los sombreros rojos que ostentaban para que sus compañeros les dieran dinero.

La historia no terminó aquí. Camino del partido, los hooligans del Arsenal ocuparon la parada del Metro Liceu, donde estuvieron picando los carteles y haciendo explotar bengalas por todo el andén.