El Barça sigue planificando con cautela el futuro de su delantera, especialmente ante la incertidumbre que rodea a Robert Lewandowski. En los últimos meses, varios nombres han sonado como posibles recambios del delantero polaco. Uno de ellos ha sido Dusan Vlahovic, un futbolista que llegó a estar sobre la mesa, pero que ya ha sido descartado de forma tajante.
En los despachos del Barça se valoró al delantero serbio como una alternativa interesante por edad y experiencia en grandes ligas. Sin embargo, el análisis profundo de su rendimiento reciente ha cambiado por completo la percepción inicial. El bajo nivel mostrado esta temporada en la Juventus ha generado muchas dudas, hasta el punto de provocar una decisión firme por parte de Hansi Flick.
Flick no lo ve ni como recambio de Lewandowski
Y la realidad es que Flick no considera a Vlahovic un delantero fiable para liderar o complementar el ataque azulgrana. El técnico alemán entiende que el Barça necesita un perfil muy concreto con movilidad, capacidad asociativa, presión alta y mentalidad competitiva constante. En ese análisis, el serbio no encaja.
Su irregularidad, la falta de continuidad goleadora y las dudas en partidos grandes han pesado mucho. Flick considera que Vlahovic no ofrece garantías ni como relevo directo de Lewandowski, ni siquiera como una alternativa puntual en un contexto de máxima exigencia. Para el entrenador, el nivel mostrado en la Juventus no está a la altura de lo que exige el Barça. Además, el cuerpo técnico entiende que incorporar un delantero que no marque diferencias claras sería un error estratégico, especialmente en un club con limitaciones económicas donde cada fichaje debe ser una apuesta segura.
Ni siquiera por detrás de Ferran Torres
De este modo, la decisión ha ido todavía más lejos. Flick tampoco ve a Vlahovic con nivel suficiente para ser el suplente de Ferran Torres, un futbolista que, pese a no ser indiscutible, sí ofrece versatilidad, sacrificio y compromiso táctico. En la comparación directa, el alemán considera que Ferran aporta más al colectivo que el delantero serbio. La realidad es que en el Barça ya no contemplan operaciones de relleno. Si se ficha un delantero, debe ser uno que convenza plenamente al entrenador y que eleve el nivel de la plantilla desde el primer día. Vlahovic no cumple ese requisito y, por tanto, ha quedado completamente descartado.
En el club asumen que, si no aparece un perfil de gran nivel que seduzca a Flick, no se hará ningún movimiento en esa posición. No habrá fichajes por oportunidad ni por nombre. Así pues, el mensaje es claro. Dusan Vlahovic ya no está en la órbita del Barça. Flick ha dicho no, considera que no tiene el nivel necesario y el club ha cerrado definitivamente esa puerta.