El Barça ya no considera intocable a Jules Koundé. Lo que hace solo unos meses parecía impensable ahora está encima de la mesa: si llega una oferta potente, el club escuchará. En concreto, en los despachos del Camp Nou ya se habla abiertamente de una cifra que cambiaría el escenario por completo. Con 50 millones fijos más 20 en variables, la puerta se abriría.

La temporada del francés no está siendo la mejor. Irregular, con partidos brillantes alternados con actuaciones muy discutidas, Koundé ha pasado de ser un pilar indiscutible a generar más preguntas que respuestas. Flick, que llegó con la idea de construir una defensa sólida y fiable, empieza a dudar. No de su talento, sino de su impacto real en el día a día del equipo.

De intocable a negociable en solo unos meses

En el Barça admiten que Koundé ya no es intocable para Flick. El técnico alemán valora su nivel, su físico y su salida de balón, pero también ha detectado una falta de continuidad que empieza a cansar. Hay partidos en los que parece uno de los mejores laterales de Europa y otros en los que desconecta, sufre y se diluye. Esa montaña rusa no encaja con la exigencia que Flick quiere imponer.

Jules Kounde celebra gol Barça Champions League Europa Press

Además, su rol ha sido un foco constante de debate. Koundé ha vivido un comienzo de curso de lo más complicado, sin regularidad y sin esa confianza que derrochaba en la 24/25, donde se consagró como uno de los mejores del mundo en su puesto. Flick tiene claro que le sobran condiciones para ser el mejor del mundo, pero debe mantenerse centrado y a un nivel regular.

50+20 millones: la cifra que lo cambia todo

Aquí entra el factor mercado. En el Barça saben que Koundé tiene muy buen cartel. Y si algún grande aparece con una oferta de 50 millones más variables, el club no se cerrará en banda. Al contrario, se sentaría a negociar. La operación permitiría ingresar una cantidad importante y liberar margen salarial en un verano que se prevé movido. Eso sí, la postura del jugador es clara. Koundé quiere seguir. Cree que puede ser uno de los mejores centrales del mundo y está convencido de que, jugando centrado y con confianza, puede dar un salto definitivo. Pero en el Barça ya no basta con la intención. Le piden mucho más liderazgo y regularidad.

La sensación interna es clara: si Koundé da ese paso, seguirá siendo clave. Si no, el club no tendrá miedo a tomar una decisión dura. Flick ya ha dejado claro que nadie está por encima del proyecto. Y Jules Koundé no es una excepción.