El Barça vive un momento de cambio inesperado que puede alterar de forma radical la planificación del próximo verano. Todo parte del último partido contra el Betis, donde Lamine Yamal brilló con luz propia actuando como mediapunta. Esa posición, hasta ahora propiedad de Dani Olmo y Fermín López, podría experimentar un vuelco que modificaría el futuro inmediato del joven onubense. La irrupción de Lamine en esa zona del campo no solo abre posibilidades tácticas nuevas para el Barça, sino que también altera la hoja de ruta en el capítulo de ventas.
Y es que en el pasado mercado ya llegaron ofertas importantes por Fermín López. Propuestas que el club rechazó porque consideraban al jugador una pieza fundamental en la construcción del proyecto. Sin embargo, la realidad ha cambiado. Si Lamine continúa explotando como mediapunta, una evolución que dentro del club consideran inevitable a medio plazo, el rol de Fermín podría verse reducido de forma drástica. Y en un Barça que necesita ingresos inmediatos para respirar financieramente, reducir minutos a un jugador altamente cotizado es una combinación que conduce directamente a una venta estratégica.
El cambio de Lamine que reordena la mediapunta
La sensación dentro del vestuario y en el staff técnico es que Lamine Yamal posee un talento diferencial que no puede limitarse a la banda derecha. Desde hace meses se trabaja la idea de situarlo más cerca del área, donde puede dar su última evolución como futbolista total. Cuando jugó como mediapunta ante el Betis se vio un jugador capaz de desequilibrar entre líneas, generar superioridad constante y ofrecer una versión mucho más influyente en el juego ofensivo del equipo.

Ese cambio afecta directamente a Fermín López. El andaluz ha sido siempre un jugador vertical, intenso, fiable, pero no un generador del nivel que sí puede alcanzar Lamine. Y en una plantilla donde cada minuto cuenta, la competencia puede convertirse en un problema para quien no esté en la primera línea de prioridades. Y Fermín podría quedar ahí.
La opción de los 70 millones, la vía que más gusta en los despachos
De este modo, el Barça sabe que en el mercado de junio habrá clubes dispuestos a poner sobre la mesa 70 millones de euros por Fermín López si mantiene su progresión. Cantidades que hace un año parecían imposibles pero que ahora se contemplan como una solución financiera imprescindible. El club necesita vender y, si Lamine se consolida como mediapunta, la salida de Fermín será cada vez más lógica y más inevitable. Así pues, la explosión de Lamine Yamal no solo abre una puerta futbolística, sino que también podría abrir la caja fuerte del Barça este verano.