Unas temporadas atrás, el Barça fue capaz de coronarse campeón de liga, contra todo pronóstico, con una de las líneas defensivas más sólidas que se le recuerdan en mucho tiempo. En este sentido, más allá del gran nivel que mostraron, en ese momento, Ronald Araujo y Koundé, uno de los hombres más fuertes de esa línea defensiva que tantas veces dejó la portería a cero fue Andreas Christensen, cuyo pico de rendimiento llegó de la mano de un Xavi Hernández que lo dejó todo en manos de una pareja de centrales formada por el danés junto a Araujo, erigiendo un muro defensivo que secaba a sus rivales.
Sin embargo, con el paso de los años, las lesiones y con la llegada de Hansi Flick al banquillo del Barça, el papel de Andreas Christensen ha cambiado radicalmente. El año pasado la excusa era que el ex del Chelsea no estaba en condiciones de jugar por culpa de la lesión que había estado sufriendo. Sin embargo, en esta segunda temporada con Flick al frente y con mil y una dudas en el eje de la zaga, parece que Christensen sigue sin tener la oportunidad de entrar en ninguno de los planes de un Flick que no está por la labor de hacer inventos de ningún tipo en una defensa que está en cuadro.
Christensen tiene los días contados en can Barça
En este mismo sentido, parece que la decisión de Flick respecto de la pareja de centrales titular en el equipo es muy clara. A partir de ahora, la apuesta va a ser por Eric Garcia y Pau Cubarsí, con Araujo como tercer central. Una decisión que deja a Christensen en una cuarta posición que apenas le va a dar minutos. De hecho, esta temporada solamente ha disputado un total de 338 minutos. Una cantidad absolutamente mínima y que demuestra y evidencia que el danés no va a contar para un Flick que lo ve como una opción de emergencia y nada más.
Todo esto, sumado a que, a sus 29 años, todavía tiene muchos años de buen fútbol por delante, han llevado al danés a dar por casi finalizada su etapa en el Barça. Y es que, si Flick no cambia radicalmente de opinión, todo apunta a que esta va a ser la última temporada de Christensen en can Barça, donde ha sido un jugador importante en momentos muy determinados y de donde parece haber desaparecido por completo desde que llegó el actual entrenador alemán del FC Barcelona.
