El FC Barcelona vive semanas de tensión deportiva, pero también de pequeñas certezas. Una de ellas es que Hansi Flick necesita recuperar piezas, estabilidad y un once reconocible. En medio de ese rompecabezas, el técnico alemán ha decidido dar un paso atrás y rectificar: Dani Olmo volverá a ser titular ante el Alavés. Una decisión necesaria después de varios partidos marcados por dudas, lesiones y desajustes en el mediocampo.
La realidad es tozuda. El Barça lleva meses viviendo entre la enfermería y la urgencia competitiva. El regreso de Pedri entrenando con el grupo había sido una bocanada de aire fresco, pero la alegría duró poco: la lesión de Fermín López, uno de los jugadores más en forma del equipo, volvió a golpear los planes de Flick. El técnico siente que cada vez que recupera a un futbolista, pierde a otro. Y esa sensación ha condicionado decisiones recientes.
Dani Olmo atraviesa una fase irregular en el Barça
En ese contexto, la figura de Dani Olmo se ha vuelto decisiva. No solo por su calidad, sino porque las bajas han obligado a Flick a improvisar constantemente. Olmo, que regresó hace poco de una lesión, ha vivido semanas irregulares. Primero fue suplente ante el Brujas en Champions y también contra el Elche en LaLiga, mientras el cuerpo técnico buscaba que recuperara ritmo sin asumir riesgos. Luego, cuando parecía asentarse, volvió con fuerza: fue titular ante el Celta y el Athletic, ofreciendo minutos de calidad pero todavía lejos del nivel dominante que mostró al inicio de temporada. De hecho, contra el Celta, el titular iba a ser Marc Casadó, pero unas molestias de última hora abrieron a Olmo las puertas del once inicial.
Sin embargo, el golpe llegó en Londres. Ante el Chelsea, Olmo volvió al banquillo. Una decisión que sorprendió. No porque no estuviera recuperado, sino porque el equipo había mostrado una preocupante falta de creatividad interior. Flick entendió después del partido que lo necesitaba entre líneas. Por eso, con Fermín fuera y Pedri aún sin estar al 100%, el regreso del internacional español al once se ha convertido casi en una obligación.
Olmo volverá al once contra el Alavés
Mientras tanto, otras piezas del mediocampo siguen moviéndose. Frenkie de Jong es el único fijo para Flick, aunque las dudas siguen estando en torno a la figura del mediocentro. En los últimos dos encuentros, el técnico apostó por Eric Garcia como sorpresa táctica, pese a tener a jugadores más naturales en esa posición como Casadó o Marc Bernal. Pero la expulsión de Ronald Araujo en Stamford Bridge cambia el tablero: Flick debe reordenar la defensa y, probablemente, devolver a Eric a la zaga junto a Pau Cubarsí.
Eso abre la puerta a que Casadó regrese al doble pivote junto a De Jong. El canterano ha tenido minutos irregulares, pero gusta al staff por su posicionamiento y capacidad para dar equilibrio. Flick sabe que, sin él, el equipo pierde orden.