Ansu Fati ha recuperado su chispa en el AS Mónaco, y con ella, ha despertado una ola de interrogantes que sacuden los despachos del FC Barcelona. Si bien la cesión hasta 2026 incluye una opción de compra no obligatoria que, en teoría, da control al Barça sobre su futuro, las recientes y deliberadamente ambiguas declaraciones del director deportivo monegasco, Thiago Scuro, han disparado las sospechas. Estas palabras sugieren la posible existencia de una cláusula contractual secreta que otorgaría al club francés una prioridad o ventaja decisiva para asegurar la permanencia de la joven estrella azulgrana en el equipo.
La racha de Ansu Fati en el Mónaco ha sido explosiva: su reciente doblete ante el Niza elevó su cuenta a seis goles en tan solo cinco apariciones. Esta vorágine goleadora ha pulverizado un récord histórico, convirtiéndolo en el jugador más rápido en alcanzar cinco tantos en la liga francesa desde 1948. A pesar de este meteórico despegue, el director deportivo ha puesto un freno al entusiasmo: el club prefiere la cautela, indicando que el éxito inicial no precipitará una decisión sobre el futuro a largo plazo del joven atacante. Scuro subrayó que la prioridad es asegurarle las condiciones idóneas para que se consolide como un jugador clave y regular, antes de tomar una decisión final sobre su fichaje permanente.

El club del Principado juega con el silencio como arma negociadora
Thiago Scuro fue tajante… pero demasiado sutil. En rueda de prensa, el directivo afirmó lo siguiente: “Bueno, sobre la opción de Ansu, este no es un tema para nosotros. Nuestro tema aquí hoy es seguir ofreciéndole todas las condiciones para seguir desarrollándose, dar a él toda la organización para que siga teniendo minutos, siendo un jugador muy importante y consistente para AS Monaco. El lado de negocios no es importante ahora. Esto está ahí en el momento correcto”.
Y agregó: "Tomaremos la decisión oportuna. AS Monaco está protegido en esta situación por el tipo de acuerdo que tenemos con el jugador y con Barcelona, así que no es un punto de discusión para nosotros. El objetivo es la performance, mantenerlo en el terreno de juego de una buena manera”, una frase que, traducida del lenguaje del fútbol, sugiere que hay algo más que una simple cesión. Fuentes cercanas al club monegasco aseguran que el acuerdo incluiría una cláusula de preferencia, que daría al Mónaco prioridad para negociar una compra definitiva si el Barça decidiera vender.

La cesión de Ansu Fati podría esconder más de lo que se dice públicamente
Recordemos que el Barça extendió el contrato de Ansu hasta 2028, un movimiento que en su momento buscaba blindar a una de sus mayores promesas. Sin embargo, la delicada situación económica del club hace que cada cesión se analice con lupa. Si el Mónaco posee realmente algún tipo de prioridad o derecho preferente, Laporta y Deco podrían encontrarse en una encrucijada peligrosa. Y es que si el jugador mantiene este nivel, su valor podría dispararse por encima de los 50 millones de euros, una cifra tentadora para un club que aún batalla con el “fair play financiero”. En ese escenario, el Mónaco tendría la sartén por el mango.
Lo cierto es que nadie fuera de los despachos conoce los términos reales del acuerdo. El hermetismo de ambas instituciones alimenta el misterio y da pie a teorías de todo tipo. Lo único evidente es que Ansu está brillando como nunca, y el Mónaco, lejos de aclarar la situación, prefiere dejar que el silencio haga su trabajo.