Alemania estaba de celebración en el planeta baloncesto hasta este lunes. Tras conquistar el Eurobasket de la mano de Àlex Mumbrú, el técnico catalán no ha podido acudir a la ciudad de Frankfurt por motivos de salud, donde se han llevado a cabo las celebraciones de la selección. Mumbrú, después de erigirse en héroe tras llegar al banquillo alemán ahora hace un año, se trasladaba este lunes a Barcelona para someterse a exámenes médicos.
Àlex Mumbrú no ha superado la pancreatitis y será operado para prevenir futuras complicaciones biliares
Las pruebas a las que se ha sometido el exjugador de 46 años han determinado que no ha superado la pancreatitis. Así pues, después de desviarse del planning de la selección con tal de celebrar el título con la afición, Àlex Mumbrú permanecerá hospitalizado en Barcelona al menos durante dos semanas.
De hecho, los mismos médicos que atendieron su situación quedaron sorprendidos de cómo el entrenador fue capaz de seguir concentrado con la expedición ganadora del Eurobasket al ver su diagnóstico. De hecho, el exentrenador del Valencia Basket será operado para prevenir futuras complicaciones biliares.
Concretamente, la cirugía por laparoscopia tendrá lugar cuando Àlex Mumbrú supere su pancreatitis. Y una vez estabilizado el estado de su páncreas, los médicos procederán a extirparle la vesícula biliar con tal de evitar complicaciones posteriores, como, por ejemplo, la aparición de nuevos cálculos biliares.
Àlex Mumbrú, un campeón que ha convivido con la pancreatitis durante todo el Eurobasket
La gesta de Alemania, campeona del Eurobasket sin perder ni un solo partido, tiene como valor añadido que Àlex Mumbrú ha tenido que convivir con una pancreatitis desde que empezó el torneo. De hecho, el día antes del debut del combinado teutón, Àlex Mumbrú tuvo que ser ingresado de urgencia en la ciudad de Tampere, viéndose obligado a perderse todos los partidos de la primera fase.
Aunque no acompañó a su equipo de manera física desde los pabellones, sí que lo hizo en el apartado emocional. Todos ellos, volcados con el compromiso deportivo y con la figura de su entrenador, mantuvieron contacto constante con un Mumbrú que delegó responsabilidades sobre su ayudante Alan Ibarhimagic, pero que, de igual manera, se mantuvo conectado al Eurobasket.
Volvió al banquillo contra Portugal, reconociendo que estaba lejos de su 100%, pero al frente de la campeona del mundo, Mumbrú llevó a la selección alemana a conquistar el Eurobasket 32 años después. Sin duda, una hazaña que cobra todavía más épica en vista del delicado estado de salud del entrenador catalán.